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El sumergible Titan, durante una de sus inmersionesOceanGate Expeditions

¿Dónde está el submarino del Titanic? Las cuatro hipótesis sobre lo que podría haber pasado

El sumergible podría estar hundido o haber emergido a la superficie, aunque sin posibilidad de abrir la cápsula sin ayuda externa

Un amplio dispositivo de seguridad busca desde el pasado domingo el minisubmarino turístico Titan, extraviado cuando descendía al pecio del Titanic. A apenas 24 horas de que expire el soporte vital del aparato, son varias las hipótesis que expertos en este tipo de vehículos –incluido el jefe del Área de Submarinos del Estado Mayor de la Armada, Ernesto Zargo Gil, en una entrevista para El Debate– han trazado para intentar explicar su posible situación. Esta madrugada, los vehículos de salvamento han detectado «sonidos» en intervalos de 30 minutos de la zona de búsqueda.

Fallo de comunicación

La hipótesis más optimista es que el sistema de comunicación del minisubmarino haya fallado, por lo que simplemente no pueda contactar con el buque nodriza desde el cuál inició el descenso. Si hubiera emergido, en cualquier caso, el sumergible sería más visible, pero según ha revelado un periodista que hizo el viaje el año pasado, la cápsula está atornillada y solo puede abrirse desde fuera, por lo que el tiempo de duración del soporte vital estaría corriendo igualmente.

Fallo de propulsión

Además del sistema de comunicación, un agravante sería que también hubiese fallado el sistema de propulsión. En ese caso, el aparato habría iniciado un ascenso hacia la superficie, pero muy lentamente. El contacto se perdió alrededor de dos horas después de iniciar la inmersión.

Casco dañado

El peor escenario estriba en que el casco hubiese resultado dañado y, en consecuencia, una vía de agua hubiera inundado y hecho naufragar el submarino. En ese caso, el rescate sería imposible.

Atrapado

Es posible que el minisubmarino hubiera quedado atrapado en el pecio del Titanic. La operación de salvamento en dicho escenario es «extremadamente complicada, pero no imposible», como esclarece Zarco Gil, ya que los vehículos de rescate capaces de descender a esa profundidad son muy escasos.