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Vista del volcán Popocatepétl, al sureste de Ciudad de México

Un nuevo volcán surgirá al sur de Ciudad de México dentro de varios siglos

Los expertos trabajan para determinar cuál podría ser la localización exacta

Ciudad de México (CDMX), una de las urbes más pobladas del mundo con 22 millones de personas contando su área metropolitana, podría ver nacer un nuevo volcán al sur de su extensión territorial dentro de entre 800 y 1.200 años.

Geólogos y vulcanólogos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) revelaron la semana pasada que la Sierra del Chichinautzin, a escasos kilómetros de los pueblos adyacentes a CDMX más meridionales, sumará otro más a los más de 300 de volcanes monogenéticos que atesora. El enclave exacto es difícil de predecir, y por eso los investigadores llevan años monitorizando los niveles de dióxido de carbono del subsuelo para determinar el lugar preciso en el que podría emerger.

El matiz monogenético es importante. Este tipo de volcanes se distinguen de los poligenéticos en que erupcionan una sola vez, suele tener una existencia corta y su altura es más baja.

La principal referencia de los cientos de volcanes en Chichinautzin es el Xitle, que nació hace aproximadamente 2.000 años y sepultó la ciudad de Cuicuilco bajo un manto de lava que fluyó a lo largo de 300 kilómetros cuadrados. Marie Noëlle Guilbauld, investigadora de la UNAM, puntualiza que en un escenario actual la erupción probablemente no causaría muertos porque la población sería desalojada, pero la lava arrasaría a su paso.

El volcán monogenético más reciente fue el Paricutín, que surgió en 1943 en el estado de Michoacán, concretamente entre los pueblos del actual Nuevo San Juan Parangaricutiro y Angahuam y cerca de la ciudad de Uruapan. Los primeros temblores del Paricutín se detectaron un mes antes y durante sus primeras 24 horas se alzó 30 metros. Su actividad continuó hasta 1952, cuando cesó de forma repentina. En total, el Paricutín alcanzó 424 metros de desnivel con respecto al Valle de Quitzocho-Cuiyusuru en el que se enclava y arrasó el pueblo de San Juan Parangaricutiro, cuyos habitantes fueron reubicados a la nueva localidad.

Con más de 2.000 volcanes por todo su territorio, México es uno de los países con más actividad volcánica del mundo.