Las ranas hembras fingen su muerte para evitar aparearse con machos no deseados
Al analizar los resultados vieron que de las 54 hembras que se sometieron al experimento, un 83 % intentó rotas su cuerpo para liberarse
Si una rana macho comienza a aparear a una rana hembra europea, ésta sabe que no podrá deshacerse del «indeseado». Según una investigación de la revista The Royal Society, las hembras de ranas reproductoras explosivas «no tienen medios para rechazar a los machos no deseados», por eso han adquirido varias estrategias, entre ellas fingir la muerte durante dos minutos.
Según explicó Carolina Dittrich, doctora y primera autora del estudio y parte del Museo de Historia Natural de Berlín, a The Guardian en una entrevista, anteriormente se creía que las hembras «no podían elegir ni defenderse de esta coerción masculina». Sin embargo, los resultados de la investigación demostraron lo contrario.
Para llegar a esta conclusión, Dittrich y el coautor del estudio, el doctor Mark-Oliver Rádel, en 2019 colocaron a dos ranas macho con dos ranas temporaria en una caja, una grande y la otra más pequeña. Cuando estaba todo listo para que comenzase el experimento comenzaron a grabar. Al revisar las imágenes de vídeo observaron que las hembras evitaban los intentos de apareamiento de los machos.
Al analizar los resultados vieron que de las 54 hembras que se sometieron al experimento, un 83 % intentó rotas su cuerpo para deshacerse de él. Las llamadas de liberación –gruñidos y chirridos– fueron emitidas por el 48 por ciento de las hembras, todas las cuales también rotaron su cuerpo.
Sin embargo, el 33 % de las «hembras abrazadas por un macho» experimentaron una inmovilidad tónica, ya que se vio que estas ranas mostraron poses que recordaban a la muerte. El equipo agregó que tendía a ocurrir junto a la rotación y la llamada.
Las hembras más pequeñas, señalaron, empleaban con más frecuencia las tres tácticas juntas que las más grandes. Mientras que la rotación en combinación con la llamada se asoció con un tamaño corporal femenino más grande.