Inteligencia artificial (IA) es un término acuñado por el profesor de Stanford John McCarthy en 1956
Así es la IA que te dice qué te hace envejecer y cuál es tu edad biológica
Su algoritmo revela las causas subyacentes del proceso de envejecimiento, más allá de los marcadores tradicionales como los telómeros
La búsqueda de la inmortalidad ha sido un anhelo humano desde tiempos inmemoriales, y la Inteligencia Artificial (IA) emerge como un aliado poderoso en esta empresa. En España ya existen centros que se basan en el reloj epigenético para evaluar la salud orgánica de las personas. Este reloj, en contraposición al cronológico, revela nuestra verdadera edad biológica, marcando así un hito en la lucha contra el envejecimiento.
El estudio del Hospital Brigham and Women, publicado en Nature Aging, representa un avance significativo en esta búsqueda. Su algoritmo es capaz de identificar los factores que aceleran el envejecimiento, destacando diferencias genéticas individuales. Además, revela las causas subyacentes del proceso de envejecimiento, más allá de los marcadores tradicionales como los telómeros.
El reloj epigenético, tal y como explica el doctor Alfonso Galán de Neolife, se basa en la metilación del ADN, un proceso que regula la expresión génica y se ve afectado por factores ambientales como la dieta y el estilo de vida. La protección de estos procesos de metilación es crucial para preservar la salud y prevenir enfermedades relacionadas con el envejecimiento.
El estudio también identifica cómo una vida sedentaria y una dieta poco saludable influyen en la longitud de los telómeros, las cuales son cruciales para mantener la integridad del ADN. El machine learning ha permitido desarrollar nuevos relojes biológicos capaces de distinguir las diferencias de metilación que impulsan el envejecimiento.
Aplicando Inteligencia Artificial a la epigenómica, el estudio creó un mapa genético que identifica las regiones del ADN relacionadas con el envejecimiento biológico. Este avance permitirá desarrollar intervenciones personalizadas para promover la longevidad y prevenir enfermedades asociadas con el envejecimiento.
Estos hallazgos también podrían ayudar en el diagnóstico de desfases entre la edad cronológica y biológica, permitiendo intervenciones precisas como cambios en el estilo de vida, terapias hormonales y suplementación. La medicina antiedad avanza así hacia un enfoque más personalizado y preventivo para promover la salud y el bienestar a lo largo de la vida.
