Starship
Elon Musk revela sus planes para colonizar Marte y pone fecha al cuarto vuelo de su nave interplanetaria
Acostumbrado a trabajar y hacer que sus empleados trabajen «con un sentido maníaco de la urgencia», como expone en su biografía autorizada el periodista Walter Isaacson, Elon Musk presentó el pasado sábado en Starbase, la base espacial de su compañía SpaceX en el sur de Texas, una actualización no solo sobre los próximos vuelos de prueba de su meganave Starship, sino también de sus planes para colonizar Marte, algo que previsiblemente no ocurrirá hasta dentro de varias décadas, tal vez siglos.
Cuando no se había cumplido aún un mes desde que el 14 de marzo la Starship lograra volar en órbita durante una hora antes de desintegrarse en el reingreso, el magnate sudafricano y dueño y fundador de SpaceX, la empresa constructora del cohete, reveló en primer lugar el pasado viernes 5, vía X, que la próxima prueba tendrá lugar en mayo.
Para ello, como siempre, tendrá que recibir el visto bueno de la Administración Federal de Aviación, la entidad gubernamental encargada de supervisar y conceder este tipo de permisos en suelo estadounidense. Sin embargo, a la vista de lo bien que pareció ir el tercer vuelo, el más exitoso con diferencia hasta ahora de los realizados por Starship, es de suponer que el plazo para el próximo lanzamiento se acorte sustancialmente respecto a los casi cuatro meses que pasaron entre el segundo vuelo (18 de noviembre del pasado año) y el siguiente y último (14 de marzo).
Ya subido, un día más tarde, sobre un escenario montado en Starbase, Musk desgranó nuevos detalles sobre sus planes.
En primer lugar, reveló que si el próximo vuelo cumple algunos de los objetivos previstos y el cohete Super Heavy, que impulsa a la Starship durante el lanzamiento, logra realizar un amerizaje simulado en el océano, en el quinto vuelo se intentará que los brazos robóticos de la plataforma de lanzamiento atrapen el cohete, diseñado para ser reutilizable. Se trata, eso sí, de una maniobra arriesgada y nunca antes probada.
Cabe recordar, llegados a este punto, que Starship será, salvo sorpresa, el vehículo con el que una nueva generación de astronautas de la NASA y otras agencias regresarán en los próximos años a la superficie lunar por primera vez en más de medio siglo. Esa es, sin embargo, la primera parada que figura en la mente de Musk, para quien el verdadero destino de la Starship es Marte.
Muchas Starships y un millón de marcianos
El magnate, que fundó SpaceX en 2002 precisamente con la idea de colonizar el Planeta Rojo y convertir en multiplanetaria a la especie humana, compartió durante su intervención sus planes logísticos para tal gesta.
A su juicio, será necesario construir más Starships de las que llevarán a los primeros colonos al Planeta Rojo, y son principalmente dos las razones: para que quien quiera volverse a la Tierra pueda hacerlo (aunque Musk cree que la mayor parte de los pioneros que vayan se quedarán allí para siempre); y para poder desguazarlas, ya que serán una importante fuente de recursos en los primeros compases de la colonización.
En total, Musk cree que para que una comunidad marciana funcione de manera autosostenible, será necesario que la sustenten hasta un millón de personas.