La Voyager 1 'vuelve a la vida' y envía datos a la Tierra por primera vez desde noviembre
La Voyager 1, la sonda espacial que más lejos ha llegado (ahora mismo atraviesa el espacio interestelar a más de 24.000 millones de kilómetros de la Tierra), ha sido reparada por los técnicos de la NASA y por primera vez desde noviembre ya vuelve a enviar datos utilizables sobre el estado de sus sistemas de ingeniería a bordo.
El siguiente paso, ha informado la agencia espacial, es permitir que la nave espacial comience a enviar información científica nuevamente.
La Voyager 1 dejó de enviar datos legibles de ciencia e ingeniería a la Tierra el 14 de noviembre de 2023, a pesar de que los controladores de la misión pudieron decir que la nave espacial todavía estaba recibiendo sus comandos y operando normalmente.
En marzo, el equipo de ingeniería de la Voyager en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) confirmó que el problema estaba relacionado con una de las tres computadoras a bordo de la nave espacial, llamada subsistema de datos de vuelo (FDS). El FDS es responsable de empaquetar los datos científicos y de ingeniería antes de enviarlos a la Tierra.
El equipo descubrió que un único chip responsable de almacenar una parte de la memoria del FDS, incluido parte del código de software de la computadora del FDS, no funciona. La pérdida de ese código dejó inutilizables los datos científicos y de ingeniería. Al no poder reparar el chip, el equipo decidió colocar el código afectado en otro lugar de la memoria del FDS. Pero ninguna ubicación es lo suficientemente grande como para contener la sección de código en su totalidad. Entonces idearon un plan para dividir el código afectado en secciones y almacenar esas secciones en diferentes lugares de la SDS.
Para que este plan funcionara, también necesitaban ajustar esas secciones del código para garantizar, por ejemplo, que todas siguieran funcionando como un todo. También era necesario actualizar cualquier referencia a la ubicación de ese código en otras partes de la memoria del FDS.
El equipo comenzó identificando el código responsable de empaquetar los datos de ingeniería de la nave espacial. Lo enviaron a su nueva ubicación en la memoria FDS el 18 de abril. Una señal de radio tarda aproximadamente 22 horas y media en llegar a la Voyager 1, que está a más de 24.000 millones de kilómetros de la Tierra, y otras 22 horas y media para recibir una señal de la nave en la Tierra. Cuando el equipo de vuelo de la misión tuvo noticias de la nave espacial el 20 de abril, vieron que la modificación funcionaba: por primera vez en cinco meses, pudieron verificar la salud y el estado de la nave espacial.
Durante las próximas semanas, el equipo reubicará y ajustará las otras partes afectadas del software FDS. Estas incluyen las partes que comenzarán a devolver datos científicos.
Misión
Lanzada en 1977, la Voyager 1 sobrevoló Júpiter y Saturno en 1979 y 1980, respectivamente, tras lo cual comenzó a dirigirse hacia los confines del Sistema Solar. En 2012, la NASA anunció que la sonda había abandonado la heliosfera (región que se encuentra bajo la influencia del viento solar y su campo magnético) y se había adentrado oficialmente en el espacio interestelar. Se calcula que tardará decenas de miles de años en pasar cerca de una estrella, aunque no se dirige a ningún lugar en concreto.
«Las Voyager están destinadas a deambular por la Vía Láctea, tal vez para siempre», ha dejado dicho la NASA.