Uno de los primeros animales de la Tierra parecía un robot aspiradora
El animal, llamado Quaestio simpsonorum, es el primero en mostrar una asimetría clara entre izquierda y derecha, un hito importante en el desarrollo evolutivo
Un equipo de paleontólogos ha identificado en el sur de Australia un fósil de un animal marino primitivo de hace 555 millones de años, uno de los más antiguos descubiertos en la Tierra.
Estos fósiles, como otros encontrados en el Parque Nacional Nilpena Ediacara, preservan un momento clave en la evolución, cuando los organismos unicelulares comenzaron a transformarse en los primeros animales complejos y visibles del planeta.
El animal, llamado Quaestio simpsonorum, es el primero en mostrar una asimetría clara entre izquierda y derecha, un hito importante en el desarrollo evolutivo. Los hallazgos fueron publicados en Evolution & Development.
«Este animal, un poco más pequeño que la palma de una mano, tiene una forma de signo de interrogación en su cuerpo que marca la distinción entre los lados izquierdo y derecho», explicó Scott Evans, profesor adjunto de geología en la Universidad Estatal de Florida y líder del estudio.
«No existen otros fósiles de este período que muestren esta organización de manera tan clara, lo que es interesante porque también es uno de los primeros animales que pudo moverse por sí mismo».
Comportamiento similar a una Roomba
Los investigadores señalaron que Quaestio se desplazaba por el fondo marino como una pequeña aspiradora Roomba, alimentándose de algas microscópicas, bacterias y otros organismos. Estos microbios formaron una capa orgánica en el fondo marino, cuya textura quedó preservada en las losas de roca del parque. Los científicos hallaron impresiones del fósil junto a rastros que indican su movimiento, conocidos como fósiles traza.
El Parque Nacional Nilpena Ediacara, que abrió al público en 2023, es parte de una candidatura para convertirse en Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Aunque el equipo ha excavado en esta zona durante décadas, Quaestio fue descubierto recientemente en una de las áreas de excavación más nuevas, en colaboración con voluntarios del Museo de Australia del Sur. Los investigadores planean seguir explorando las casi 150.000 hectáreas del parque.