'El libro de Boba Fett' y el riesgo de agotar la nostalgia
La nueva serie de Disney+ insiste en aprovechar el tirón de las leyendas de la saga Star Wars
Boba Fett es uno de los personajes más icónicos de Star Wars a pesar de que su presencia en la saga original es prácticamente testimonial. Desde muy pronto, el cazarrecompensas que vende a Han Solo y que acaba en las fauces del Sarlacc en el desierto de Tatooine, se convirtió en protagonista de disfraces, muñecos y todo tipo de merchandising.
Si a esta popularidad le sumamos el éxito de The Mandalorian, donde ya asistimos a la reaparición de Fett, es fácil entender la decisión de Disney de apostar por una producción independiente con el personaje al que da vida Temuera Morrison.
Esta nueva serie, El libro de Boba Fett, se sitúa cronológicamente en paralelo a la aventura de Mando y el famoso «Baby Yoda» (Grogu para los puristas), tras la caída de Darth Vader y el Imperio galáctico. En sus primeros episodios, y a través de flashback, se nos cuenta la historia del cazarrecompensas desde ese momento en el que todos le dimos por muerto al comienzo de El retorno del Jedi.
Esta revisión del pasado de Boba Fett se combina con su situación «actual» al frente de la organización criminal que dejo huérfana Jabba el Hutt tras morir a manos de Leia. Una posición de poder no del todo segura y que se presupone fuente de problemas, disparos y multitud de explosiones.
La calidad de The Mandalorian y su excelente final en la segunda temporada ponen el listón muy alto a El libro de Boba Fett, una serie que corre el riesgo de agotar el efectismo de la nostalgia entre los seguidores de Star Wars y que puede dejar algo frío al espectador tras los primeros capítulos emitidos.
Disney tiene programados multitud de estrenos relacionados con la saga y ya ha demostrado que, al margen de la dudosa trilogía que cerró la historia de los Skywalker, puede hacer un producto de calidad que suma nuevas propuestas con los iconos de la galaxia.
En el horizonte está la serie Kenobi, la más esperada, que contará con Ewan McGregor y el retorno de Hayden Christensen, actor que dio vida a Anakin en los episodios II y III. Veremos si para entonces los recursos nostálgicos de Star Wars no se han agotado.