La histórica noticia con la que Motos sorprendió a Maluma

El colombiano Maluma está de gira. Papi Juancho se titula. Mañana martes actúa en Madrid y por eso esta noche visitó El Hormiguero.

¿Cómo es un día de concierto para Maluma? «Me gusta siempre hacer ejercicio antes de ir a mi concierto. Entonces me levanto temprano…», contó, y fue interrumpido por Motos. «¿Qué hora es temprano?», se interesó el presentador. Respondió que con el jet lag tiene los horarios un poco trastocados, pero que pese a ello se despereza a eso de «las nueve, nueve y media». Toma un café («soy vicioso, me encanta»). Se va al gimnasio. Vuelve al hotel y desayuna. Trata de escuchar «las canciones que tiene por ahí sin terminar». Llama a su familia. A sus amigos. A eso de las cinco sale hacia el lugar del concierto. Allí atiende el «Papi Lounge», o sea, a los que han pagado por la experiencia VIP (que incluye un tour por el backstage y una foto con el artista, entre otros privilegios). En eso se demora cuarenta minutos. Después llega el turno del ping pong. Y, al fin, el concierto.

Uno de los temas que se escuchan en esta gira es su nuevo sencillo, Mojando asientos, en cuyo vídeo aparece su caballo Hércules. «Tengo más, pero ese es como si fuera mi consentido. Es mi niño. Siempre que salgo de gira lo extraño un montón, como si fuera parte de mi familia. Llegó Hércules a mi vida y me cambió la perspectiva del mundo animal y de los caballos. Fue el primer caballo que tuve y ojalá me dure por mucho tiempo, porque me hace muy feliz», explicó.

Fue su padre el que le echó el ojo a Hércules en Colombia, mientras su hijo estaba de viaje. Su progenitor trabaja para él, como buena parte de la familia. Cuando tenía 15 años, le dio un gran disgusto. Le dijo que cambiaba el balompié por el reguetón. «No quiero hacer fútbol, quiero hacer música». «Huevón, ¿tú está loco», preguntó el padre mientras frenaba el coche. Después, entró incluso a lo concreto: «¿Por qué reguetón, y no pop?».

Además de por la gira, este año será noticia por su debut en el cine: Cásate conmigo. Con su amiga Jennifer López y Owen Wilson. El rodaje de la película coincidió con un concierto del colombiano en el Madison Square Garden. Se decidió que se aprovecharía para rodar alguna escena. Era musical: cantaba él a dúo con Jennifer. El problema es que no se conocía muy bien la canción. Y justo cuando se iba a arrancar con el tema se dio cuenta de que los cuatro teleprónter estaban apagados. «Fue horrible», recordó, pero entre su compañera y sus tablas salió del apuro.

Apuros pasa, últimamente, cuando vuela. Y eso que lo hace en su avión privado, aquel que compró por 18 millones de euros en 2019. «Me pongo nervioso», reconoce. Es un miedo nuevo. De hecho, contó que lo primero que hace al subir por la escalerilla es tomarse un 'relajante': «Dame un vino», pide. Lejos quedan los tiempos aquellos en los que pedía al piloto del avión «sentir la fuerza G» (por cierto, ¡el que iba a los mandos cumplió su deseo en aquella ocasión!).

Dos conciertos muy especiales

La gira tendrá una parada muy especial el próximo 30 de abril, en su casa, en Medellín, ante 40.000 personas. «Es el concierto más importante en mi carrera. Siempre quise dar un concierto en el estadio de Medellín. Hice varios conciertos en mi tierra, pero ninguno como el que va a pasar ahora. Tengo muchas sorpresas, pero no puedo decir mucho», explicó el artista, que interpretó un tema en formato acústico en el plató de El Hormiguero.

Antes, mañana martes, será el turno de Madrid. Fue Motos el que le comunicó que batirá el récord de asistencia del WiZink Center, 17.400 personas. Una noticia histórica para el recinto madrileño y para el propio artista. El anterior tope lo tenía Metallica desde el 2018: 17.267 asistentes. «Ese es un logro del público, de los fanáticos», reaccionó, emocionado, Maluma.