‘Pasapalabra’ pierde la emoción

La audiencia sigue respondiendo, pero la emoción ha decaído. La marcha del onubense Jaime de Pasapalabra ha ido en detrimento de la competitividad. No es una crítica a los dos concursantes que han rivalizado con el burgalés Orestes desde entonces. Es una realidad.

Jaime cayó en La silla azul el pasado 30 de marzo. Se puso así fin al duelo más largo de la historia del programa en España: 102 tardes de rivalidad. El onubense fue el ganador de ese enfrentamiento particular. Y de una forma rotunda: 48 victorias (47 %), 22 empates (21,5 %) y 32 derrotas (31,3 %). Es decir, redondeando, Orestes perdió la mitad de los enfrentamientos frente al andaluz.

Jaime se fue, derrotado en La silla azul por Elías, quien llegó, vio y venció. En su estreno en El Rosco superó a un Orestes desconcertado, afectado emocionalmente por el adiós de su rival, pero amigo, onubense. Esa victoria fue un espejismo. A la jornada siguiente se registró un empate, pero los siguientes tres duelos ya los ganó el burgalés; es más, en uno de ellos se quedó a una respuesta correcta de llevarse el bote. A Elías lo ha relevado Fer, que ha perdido en sus tres enfrentamientos con Orestes.

Es decir, el burgalés ha ganado seis enfrentamientos seguidos, una racha victoriosa sin precedentes desde que llegó al concurso el 1 de octubre del pasado año, hace más de medio año. Su tope estaba en cinco triunfos, logradas justamente en los cinco duelos previos a la llegada de Jaime al programa, el 27 de octubre del pasado año.

Por tanto, Orestes está aprovechando perfectamente la marcha del andaluz. Juega tranquilo, con la ventaja de saberse superior. Y el bote sigue creciendo: ya está en 886.000 euros. Lo que decrece es la emoción.