Así se siente Paz Padilla tras su despido de Telecinco

Hablaron del amor y del humor, y (un poco) del trabajo perdido. Paz Padilla y María Casado se conocieron justo antes de la entrevista, pero la conversación fluyó en Las tres puertas –que anoche acabó tras diez entregas– como si fuesen amigas de toda la vida.

El amor

La vida de Paz Padilla en los últimos años está ligada a su historia de amor con Antonio. Con 14 años se enamoró de él, que tenía 17. La vida los separó cuando ella se hizo artista y se fue a Madrid, pero los unió más tarde, en 2012. Él murió en 2020, víctima de un tumor cerebral. «Aunque resulte un poco extraño, le doy sentido a que Antonio falleciera. Yo aparecí en su vida para ayudarle a morir».

Ese episodio lo contó con detalle en El humor de mi vida: «Él ha cambiado mi vida y la vida de mucha gente. Al escribir yo el libro del acompañamiento de Antonio, y la aceptación, y cómo yo viví el proceso».

Aún se duele. «Yo lloro todos los días, Ana», le dijo a María Casado, que se tomó con humor la confusión. «Aceptar no es olvidar», precisó. Aunque el duelo es permanente, está abierta a enamorarse de nuevo. «¡El amor es tan bonito! No se dosifica. Y si viene una persona que me quiera y me haga volver a sentir lo que yo sentía, será diferente. Porque no hay dos amores iguales».

El humor

Casado preguntó si tanto filtro está perjudicando a la buena salud del humor. «Yo creo que sí. Es que no podemos ser espontáneos. Si algo caracteriza al humorista es la improvisación. Y yo cuando improviso, no puede pensar mucho… No puedes estar pensando: '¿habrá alguien que se sienta mal si hago este chiste?'». En todo caso, si es partidaria de ciertos límites: «Vamos a intentar reírnos todos, pero sin agredir».

«¿Nos reímos de lo mismo los hombres y las mujeres?», planteó la presentadora. «Yo es que soy muy hombre. Yo no sé de qué se ríen las mujeres. Los hombres, sí», replicó, y aludió al sexo y la escatología.

La tele

«¿Tú te has dado cuenta, como yo, que fuera de la tele hay vida?», preguntó Casado, queriendo llevar la entrevista al terreno de la actualidad, o sea, al despido de Paz Padilla de Telecinco tras una bronca con Belén Esteban. «Fuera de la tele está la vida. Soy tremendamente feliz. Estoy muy feliz, muy feliz. Muchas veces no te das cuenta pero eres esclava del trabajo. Y lo único que te pertenece es el tiempo. Y el tiempo pasa. Y el tiempo pasa igual para los Reyes que para los pastores».

«Tienes que tener el timón agarrado. Ya te puede llevar la marea a donde te quiera llevar, que la tormenta siempre pasa», reflexionó.