Épica, nostalgia y emoción en el final de 'Kenobi'

El clímax llegó en el último episodio de la esperadísima serie centrada en Obi-Wan Kenobi. Disney sabe lo que quieren los seguidores de la saga Star Wars y no dudan en ofrecérselo. Así tiene que ser, pero, ¿es suficiente?

El encuentro definitivo entre Kenobi y Darth Vader colma cualquier expectativa emotiva, narrativa y épica. Un recurso ya utilizado en la serie de animación Rebels (que no describiremos para evitar los spoilers) sirve para cerrar un arco que no se volverá a abrir hasta la primera película de la saga. Sin duda, lo mejor de los seis capítulos.

Al igual que sucede con la película Rogue One, estrenada ya en la época Disney, Kenobi consigue dar más valor a la trilogía original. Sin embargo, mientras la cinta ofrecía una consistente historia en su conjunto, la serie, que ya se puede ver completa en la plataforma de streaming, evidencia algunos fallos de guion y producción.

Figuras paternas

Los avances promocionales jugaron con la imagen de un pequeño Luke Skywalker en la granja de Tatooine, una trampa. La última aventura ha girado en torno a su hermana, la princesa Leia. La relación que establece con el huido jedi se suma a la lista de interesantes figuras paternas que marcan el universo Star Wars:

El propio Obi-Wan fracasará en su labor de padre-maestro con Anakin y eso explica muchas de sus decisiones posteriores; Darth Vader trata de ejercer como tal en los episodios V y VI con el sacrificio último para salvar a Luke; las series de animación (menos conocidas por el gran público) nos muestran historias como la de Kanan Jarrus y Ezra Bridger; sin olvidar la aventura protagonizada por el Mandaloriano y Grogu (Baby Yoda para los amigos).

Los altibajos de 'Kenobi'

El gancho de la serie volvía a estar en la nostalgia y en el esperado reencuentro entre Obi-Wan y Darth Vader tras su duelo en La venganza de los Sith. La vuelta de Ewan McGregor y Hayden Christensen hacía pensar que Disney ponía toda la carne en el asador y que nos encontraríamos con un proyecto al más alto nivel. La realidad es que, en algunos momentos, la producción de Kenobi deja mucho que desear, con escenas que se acercan a las calidades low cost.

Una vez presentados a los protagonistas, con su buena dosis de efectismo, la historia cojea en algunos aspectos. Quizá sea demasiado simplista, quizá hayamos tenido poco tiempo para conocer a determinados personajes... fallos que no terminan de dar redondez a un conjunto notable.

Quienes conocen en profundidad el canon de Star Wars encontrarán interesantes algunas tramas, disfrutarán con personajes como el Gran Inquisidor y serán capaces de identificar referencias concretas a otros productos de la factoría. Para un público más amplio, la serie puede pasar por una más, lejos de la genialidad de The Mandalorian.

Pese a todas las irregularidades, el maravilloso papel de Ewan McGregor sirve para justificar ese calificativo de «notable» que le podemos dar al conjunto. Además, los dos últimos episodios son excelentes, con mención especial al duelo final que ya hemos mencionado y un cierre en el que se recuperan las notas de la banda sonora original para dar aún más emoción a una serie de encuentros y despedidas que ponen el broche a Kenobi.