'Ant-Man y la Avispa: Quantumania': las dos escenas postcréditos explicadas

Vuelven Ant-Man y la Avispa a la gran pantalla con un villano que no deja indiferente a nadie, Kang el Conquistador. Esta entrega será la continuación del prólogo que comenzó en la serie de Loki. Este antagonista hizo su aparición bajo el sobrenombre de El que permanece, un Kang cansado de vivir toda una vida llena de viajes y de controlar la Sagrada Línea Temporal y que no le importaba morir. Antes de que Sylvie le clavase su espada, él ya avisó que sus variantes iban a ser muchos peores, seres que quieren ver el mundo arder, cientos de universos chocando entre sí y dando lugar a… una Guerra Secreta (Secret Wars).

Ant-Man y la Avispa: Quantumania tiene dos escenas postcréditos. La primera de ella aparece tras los créditos animados y la segunda se proyecta cuando acaban los créditos finales con fondo negro. Ambas tienen contenido muy importante para el futuro de la saga. Esta vez no han hecho como la última entrega de Doctor Strange que tuvo a todo el público de las salas esperando para ver a un personaje pegarse en la cara de forma satírica.

Aunque se haya avisado en la entradilla, las siguientes descripciones y explicaciones contienen spoilers. Hablaremos de lo que aparece en la gran pantalla y posible conexión con los cómics, porque otra cosa no, pero estas secuencias están hechas para ilusionar y lanzar teorías.

Primera escena: el Consejo de Kangs

La primera escena postcréditos muestra un coliseo donde se abren numerosos portales de donde salen diferentes Kangs. El plano sube y se muestra una estatua de dimensión colosal, es nada más y nada menos que del… Conquistador. Efectivamente esta reunión es el conocido Consejo de Kangs.

Algún amante de los cómics lo habrá descubierto nada más ver los portales y esas psicópatas variantes. Mientras se suceden estos planos se escucha una voz rasgada, es la variante Rama-Tut (Kang vestido de faraón egipcio) que muestra su malestar y preocupación porque Ant-Man y la Avispa 'presuntamente han matado' a Kang el Conquistador.

Le acompaña en la escena Centurión Escarlata (Kang con la armadura metalizada) y su gran líder, Inmortus (Kang con una toga y la barba larga). Estas tres variantes mencionan que alguien está comenzando a interferir en el multiverso, y que es momento de detenerlos porque suponen una amenaza porque pueden destruir todo lo que han construido, es decir, un multiverso seguro y además su propia existencia porque ya han 'matado' a uno de ellos.

Se puede sacar dos conclusiones, cuando las tres variantes (Inmortus, Rama-Tut y Centurión Escarlata) hablan que alguien está comenzando a interferir en el multiverso, son nuestros héroes: Spiderman y Doctor Strange que en sus entregas han viajado por diferentes universos o se ha producido un cruce entre ellos. En cuanto al Consejo de Kangs, la última vez que se celebró uno (ya lo avisó 'El que permanece' en Loki) se desencadenó una guerra multiversal.

Segunda escena: Víctor Timely

La última escena nos presenta a otra variante de Kang a principios del siglo XX en un teatro a punto de hacer una demostración científica como hacía Nikola Tesla. Esta versión se presenta con un bigote y bajo el nombre de Victor Timely, quien habla a la audiencia del tiempo y sobre cómo piensa manipularlo. Tras esta toma, se enfoca a dos rostros conocidos, Loki (Tom Hiddleston) y el Agente Mobius (Owen Wilson).

Ambos discuten sobre la apariencia de este Kang. Loki tiene un gesto contrariado y lleno de temor, mientras Mobius le contesta que «Parece un tipo agradable. Pensé que dijiste que daba miedo». Esta escena postcréditos conecta directamente con la segunda temporada de Loki que se estrenará este año y nos situarán en los sucesos tras el descontrol de la Sagrada Línea Temporal.

De esta escena se puede sacar un apunte bastante curioso, si en la escena postcréditos anterior se mostraban a todas las variantes que habían sido llamadas al Consejo de Kangs, ¿por qué esta versión no acude? Tal vez sea el Kang que aparentemente ha muerto en Ant-Man y la Avispa Quantumania. Este argumento coge más fuerza si le sumamos que el núcleo que 'supuestamente acaba' con su vida le absorbe y funciona como una 'tempad' (máquina del tiempo).