‘Pasapalabra’
Orestes roza el récord de aciertos seguidos y el bote de Pasapalabra
El burgalés atina 20 preguntas de forma consecutiva, pero una reina española del siglo XIV le priva de llevarse 2.200.000 euros
Si el lunes fue el sevillano Rafa Castaño el que se quedó a un acierto del bote, este martes el que ha rozado el gran premio de Pasapalabra ha sido su rival desde junio del pasado año, el burgalés Orestes Barbero. Además, en su carrera hacia los 2.200.000 euros de botín, este último ha logrado su récord personal de respuestas acertadas, a una de la plusmarca del programa, que aún ostenta uno de sus antiguos rivales.
Este martes, Rafa empezó mal. Cuando su casillero marcaba cinco aciertos y un fallo, Orestes se desbocó. Era su segundo turno (en el primero había atinado cuatro preguntas) y arrancaba en la letra efe: hiló 20 aciertos consecutivos, cuando hasta ahora el máximo que había acertado de forma seguida era 18, el 2 de diciembre de 2021 en su pugna con el onubense Jaime Conde. Es precisamente este último el que ostente esa plusmarca, con 21 aciertos: ocurrió el 8 de noviembre de 2021 y el burgalés fue testigo de la hazaña.
En busca del bote
Con 24 aciertos y ningún fallo en su cuenta particular, pasó palabra. «Quiero darle la enhorabuena a Orestes y desearle suerte», se apresuró a decir Rafa.
El lunes, el andaluz se lamentó porque en algún momento supo la respuesta correcta, porque la había estudiado, a la pregunta que le habría concedido el bote. Pues exactamente igual le ha pasado al burgalés este martes.
Le restaban 29 segundos a Orestes cuando se lanzó. La pregunta era: «Nombre de la reina consorte de Aragón perteneciente a la casa Moncada que se casó en 1322 con el rey Jaime II». Avanzó que diría el primer nombre que se le vino a la cabeza, «aplicando la navaja de Ocan» y apostándolo todo a uno «que se pone mucho en Mallorca». Así que dijo «Eulalia». Roberto Leal tardó unos segundos en comunicarle que no era la respuesta correcta.
«Elisenda» le habría dado el bote. «La madre que lo…», reaccionó el burgalés cuando lo escuchó. «La he estudiado. Se me ha pasado por la cabeza…», lamentó, pero finalmente optó por «un nombre sencillo» y común en Aragón y Mallorca.
Frustrado, pero con una sonrisa en la boca, Orestes se despidió. Quedaba Rafa por acabar, que se quedó en 19 aciertos y dos fallos. Este miércoles irá a la «silla azul», pero lo hará con gusto porque a punto estuvo de irse para casa.