Cine
'Asteroid City', la película de Wes Anderson rodada en Chinchón que hace aguas en medio del desierto
La nueva cinta del cineasta no convence pese a su reparto lleno de estrellas
El cine de Wes Anderson, con su colorida fotografía y sus originales historias (El gran hotel Budapest, Los Tennenbaums, una familia de genios, Life Aquatic...), despierta admiración entre el público y la crítica, pero también un sentimiento opuesto: hay quien no soporta sus películas. Con Asteroid City, el filme que acaba de llegar a los cines y que se rodó en la localidad madrileña de Chinchón, Wes Anderson deja fríos a muchos de sus seguidores más fieles y da motivos a sus detractores para alimentar su animadversión.
La culpa no la puede tener su estelar reparto (Tom Hanks, Scarlett Johansson, Margot Robbie, Tilda Swinton, Adrien Brody, Jason Schwartzman, Bryan Cranston, Liev Schreiber, Willem Dafoe, Jeff Goldblum, Matt Dillon…). Tampoco la música del gran Alexandre Desplat. La responsabilidad, para lo bueno y aquí para lo malo, solo puede recaer en Wes Anderson.
El Festival de Cannes no acogió Asteroid City con entusiasmo. Y así lo reflejó en su crónica el enviado especial de El Debate al certamen, Ernesto Pérez. «Wes Anderson, a fuerza de repetir esquemas narrativos de su obra precedente, con grandes espacios como un gran hotel en los Alpes austríacos o una entera ciudad de provincia francesa, habitados por numerosos personajes cada uno con una historia propia, deja de convencer a sus fieles seguidores cuando el humor y el absurdo de la historia dejan de tener significación narrativa», señaló Ernesto Pérez, que explicó el extraño argumento de Asteroid City a los lectores de El Debate.
«Esta vez, el lugar de la acción elegido por Anderson es un pueblo perdido en pleno desierto (todo construido de cabo a rabo por un tropel de carpinteros), situado al lado de un polígono militar con continuos ensayos atómicos y de un lugar donde, miles de años atrás, cayó un asteroide que ha creado una atracción turística que se llena y se vacía periódicamente. A este lugar llegan cinco niños superdotados que presentan sus invenciones científicas a militares y astronautas, familiares, una clase entera de alumnos, un grupo de actores que ensaya una obra teatral que nada tiene que ver con todo esto y hasta a un extraterrestre que recupera el asteroide», comentó en su crónica Ernesto Pérez.
El crítico de cine Juan Orellana también refleja en su nuevo vídeo de Pantalla 90, la revista digital de cine de la Conferencia Episcopal, ese sentimiento de decepción que provoca la nueva película de Wes Anderson en comparación con el resto de su filmografía.
«La película, que es visualmente sugerente, tiene un argumento que sabe a poco, que no está suficiente desarrollado y da la sensación de que la película se queda a medio camino. Aun así, siempre es interesante», comenta Juan Orellana.