Santiago Segura: «¿El cariño de la profesión? Me sobra con el del público y los exhibidores»

Entre la recién estrenada Indiana Jones y el dial del destino y el próximo estreno de Misión Imposible Sentencia Mortal-Parte I (12 de julio), este jueves 6 de julio llega a los cines Vacaciones de verano, la nueva y divertida comedia familiar dirigida, coescrita (con Marta González de Vega) y protagonizada (junto a Leo Harlem) por Santiago Segura.

En Vacaciones de verano, Santiago Segura y Leo Harlem interpretan a Félix y Óscar, dos amigos que pierden su trabajo y se ven obligados a aceptar un empleo para el que no parecen preparados: el de animadores infantiles en un hotel. Y con el inconveniente añadido de llevarse a sus hijos sin desvelar el secreto en su nuevo trabajo.

El Debate conversa con Santiago Segura y Leo Harlem quienes, como animadores del público y la taquilla del cine español, están más que cualificados.

–No sé si han visto el dato de audiencia de El Hormiguero de este lunes con la visita de Santiago...

–Leo Harlem: Yo no, pero sé que fue muy bien.

–Santiago Segura: Yo sí, porque salí yo. Me lo ha mandado Jorge Salvador, el productor (de El Hormiguero). Y le he dicho Hombre, soy como Bizarrap. Me dice 'no, no más. Bizarrap hizo un 16 % (de cuota de pantalla). Tú un 17 %' (17,6 % de share y 2.115.000 espectadores).

–Leo, ¿no ha aprovechado entonces para meter cizaña? El Hormiguero tuvo más audiencia con usted que con Santiago…

–Leo Harlem: ¿Le he ganado yo? ¿Cuánto hice?

–Santiago Segura: Un 18 % (exactamente, un 18,7 % y 2.761.000 espectadores). Leo el año pasado fue el actor más taquillero de España y yo, el segundo.

–Leo Harlem: Me he enterado hoy. Pero bueno, estoy encantado. A mí, la verdad, es un programa que siempre me da pereza, por la hora, pero luego cuando estás ahí, yo me dejo y al final se te hace cortísimo.

–Leo, se va a ver en la cartelera con Indiana Jones y con Tom Cruise en la nueva película de Misión Imposible. Usted no se ha visto en otra...

–Leo Harlem: Ahí estamos, los 'Paul Redford' y 'Robert Newman' (bromea). Estoy muy contento. Va a ser un proyecto, como siempre, que creo que va a funcionar, porque a la gente le encantan estas películas. Lo hemos pasado bien rodando, aunque se ha trabajado mucho. Para mí estas películas son una pasada, disfruto mucho. Disfruto con la gente, que te comenta que se lo pasa bien, que la van a proyectar en cuanto esté disponible para el colegio... Eso es muy bonito.

–Vacaciones de verano está muy bien escrita. ¿Cómo es el trabajo de guion con Marta González de Vega?

–Santiago Segura: Maravilloso. De hecho, si no fuera por Marta sería imposible este ritmo de una película anual. Yo con Torrente me tiro tres o cuatro años mínimo solo para hacer el guion porque soy un tío muy disperso. Marta es súper disciplinada, es muy graciosa, dialoga bien. Yo he intentado trabajar con otros guionistas y nunca lo he conseguido. Tienes que admirar a la persona y tiene que haber una especie de reto de decir 'qué graciosa es esta tía, tengo que intentar ser más gracioso'. Y se retroalimenta. Ese es el auténtico frontón creativo que he conseguido con Marta. Es maravilloso. Yo beso por donde pisa. Es lo que se suele decir, pero es que es muy graciosa.

–Santiago, el consejo de Hitchcock de no rodar con niños ya lo tiene más que superado…

–Santiago Segura: Acuérdate que el consejo de Hitchcock era no rodar con niños, ni con animales, ni con Charles Laughton.

–Leo Harlem: Es que el niño británico es distinto…(risas)

–Santiago Segura: Charles Laughton ya ha fallecido y no podemos trabajar con él; en lo de los animales tenía razón Hitchcock; pero en los niños hemos visto que no. Son buena gente y lo hacen muy bien.

–Leo Harlem: Son unos cracks.

–Nos dijo José Mota en El Debate que a Santiago Segura no se le había valorado todo lo que había hecho por el cine español: cómo ha salvado el cine en los años de la pandemia y cómo se arriesgó a estrenar su película en el peor momento para la industria. Leo, ¿lo ve también así?

–Leo Harlem: Me parece muy importante. He llegado al cine como he llegado, pero veo que es una industria. Más que del Ministerio de Cultura, está más cerca del Ministerio de Industria. Las salas de exhibición lo están pasando muy mal y que haya películas que contribuyan a que empiecen a entrar niños y público nuevo gracias a este tipo de películas, es fundamental. Porque luego de estas películas se saca dinero para otros proyectos: cine de autor, cine de acción, western, lo que quieras... Pero tiene que haber un sitio para que el público vea esto, porque en colectivo es totalmente distinto a verlo en casa. Y me parece muy importante ayudar y que siga prosperando la industria. Me parece una cosa loable y digna de mérito. Lo que pasa es que el humor siempre se queda en segunda fila cuando ves películas como El apartamento o Con faldas y a lo loco. ¿Qué más necesitas? Cuántas películas pretenciosas, serias o dramas se han hecho que no les llega ni a la suela de los zapatos.

–Santiago, ¿le ha faltado cariño en la profesión?

–No, a mí me sobra cariño del que yo necesito, que es el del público y el de los exhibidores. Qué más necesitas. Hay que ser muy egoísta para decir 'quiero que me quiera la industria y que me quieran los colegas'. Con que me quiera el público, y los exhibidores me tengan un cierto cariño porque les funciona el producto que le hago... No es broma. Yo no me imagino hacer una película a la que no vaya nadie. Me parece dramático que no vaya nadie, o que vaya gente y que los críticos digan que eres un genio y que te den la Palma de Oro, el Oscar y lo que sea. El público, en cambio, no va por ahí. Que te digan 'nos reímos muchísimo con tu película'... o gente realmente agradecida que me escribe o me para por la calle para decirme 'mi madre no sabes lo que se divertía, ya no está, pasó un cáncer...'.

–Leo Harlem: Pasa mucho, muchísimo.

–Santiago Segura: Es alucinante lo que le importa a la gente sonreír y reír. Yo me he dado cuenta de que a los actores prestigiosos de alguna forma les tienes respeto y admiración, pero el cariño lo reservas para los que te han hecho reír. Yo me acuerdo de Tony Leblanc. Cómo todos los taxistas decían 'lo que me he reído con Tony'. Pensar en el nombre ya les hacía sonreír, porque en los años 50 y 6, Tony hizo mucha comedia en España, hizo teatro, cine y televisión. Ese cariño que yo veía a Tony... Yo decía '¡qué bonito! Alguien que ha hecho reír... Eso no lo tiene, yo qué sé, Laurence Olivier. Piensas en él como un actorazo, pero no es como cuando piensas en actores de comedia como...

–Leo Harlem: Jack Lemmon.

–Santiago Segura: Jack Lemmon, por ejemplo, era un actor cómico brutal, que también hizo mucho drama. O, eminentemente cómico, Danny Kaye.

–Sean sinceros, ¿alguna vez han acabado el libro de Vacaciones Santillana o los deberes de verano que tenían?

–Leo Harlem: Yo es que no tenía porque aprobaba en las fechas que correspondía y luego no tenía nunca actividad. No hacía nada.

–Santiago Segura: El listo, el listo (risas).

–Leo Harlem: Salvo un verano que suspendí unas ecuaciones y me enganchó un hermano de mi madre, que era un tío que era un fenómeno y me castigó: por cada ecuación que fallaba, me ponía diez. Y se me empezaron a multiplicar y, hasta que las limpié, me pasé un mes toledano.

–Santiago Segura: Tu pregunta ha sido muy desagradable (bromea). Me ha traído unos recuerdos brutales: llevar la cartera llena de libros, de tareas que tenías, y volver y darse cuenta mi padre de que ni has abierto la cartera. Esa angustia de saber lo que tienes que hacer y no has hecho. Pero ese mes que yo que me pasaba...

–Santiago, en la entrevista en El Hormiguero contó que llevaba 20 años sin vacaciones…

–Sí, sí. A ver, por ejemplo, mis hijas y mi mujer se van la semana que viene a Benicasim. Yo me quedo rollo Rodríguez. Me voy el viernes e intento venir en el tren del domingo, pero eso no lo considero vacaciones. Un mes de vacaciones, que era lo que hacía yo de niño, era maravilloso. Que es lo que va a hacer este hombre (señala a Leo Harlem). Tengo que aprender. Y mira que me lo dijo. Esto lo contaba Carles Sans me dijo una vez que para Tricicle, julio y agosto es sagrado. Y es lo que hay que hacer por salud mental. Aquí mi amigo es muy inteligente, va a tener un mes de vacaciones. Yo soy un imbécil.

–Leo Harlem: Yo era como tú, hasta que dije 'no, se acabó'.

–Santiago Segura: A ver si el año que viene te digo 'mira, me voy un mes, en noviembre, no sé, a Islandia...'

–Leo, he leído que se coge 38 días, no 30…

–Leo Harlem: Sí, bueno, 38, la gente cómo me sigue (risas).

–Santiago Segura: Está documentado. Este es fan, fan, porque me ha hecho rabiar hasta con la audiencia de El Hormiguero. Por favor, si eso depende de la contraprogramación, muchacho…(risas).