«¿Tantos detalles solo de memoria?», pregunta Clarice (Jodie Foster) a Hannibal Lecter (Anthony Hopkins) al admirar su dibujo del Duomo de Florencia («visto desde el Beldevere») en su celda. «La memoria, agente Starling, es lo que tengo en vez de una bonita vista”, replica el mejor villano de la historia del cine, como así lo reconoció el American Film Institute. La estudiante del FBI acaba de conocer al psicópata e intenta ganárselo para que colabore en la caza de otro psicópata, Búfalo Bill. Es el primero de los encuentros de los dos personajes de El silencio de los corderos, una de las tres únicas películas que han conseguido ganar los cinco principales Oscar: mejor película, dirección, actor, actriz y guion (en este caso adaptado).