La serie con Nicole Kidman que rebautizó la cárcel a la que irá Daniel Sancho

En España están disponibles en las plataformas películas como Peligro en Bangkok, Pánico en Bangkok, Muerte en Bangkok o la serie Corrupción en Bangkok. Si uno se deja guiar por estos títulos nunca se le ocurriría poner un pie en la capital del Reino de Tailandia, que es justo lo que piensa el personaje interpretado por Nicole Kidman en una serie que no podemos encontrar en ninguna plataforma, al menos por ahora, pero que sirvió para rebautizar la cárcel a la que irá Daniel Sancho.

El hijo del actor Rodolfo Sancho se encuentra ahora de forma provisional en la prisión de Koh Samui, donde, según ha declarado este martes su abogado, permanecerá un máximo de seis meses Las condiciones de este presidio son penosas. No serán mejores las que se encuentre en el que seguramente será su próximo destino, la prisión de máxima seguridad Bang Kwang. Es donde está pasando su condena a muerte el también español Artur Segarra, el catalán que torturó, mató y descuartizó a otro compatriota (David Bernat) en 2016, y cuya pena de muerte fue conmutada por una cadena perpetua tras pedir clemencia al Rey de Tailandia.

Warren Fellows, que pasó veinte años entre sus muros y sobrevivió para contarlo en su libro The Damage Done (El daño hecho), se refiere a ella como hacen los autóctonos: «El gran tigre», porque una de sus características es su facilidad para devorar reos. Internacionalmente ha triunfado más el muy irónico sobrenombre de «Bangkok Hilton», y es aquí donde entra Nicole Kidman.

Bangkok Hilton es el título de la serie australiana de tres episodios de 90 minutos que protagonizó en y que se estrenó en 1989. Nicole Kidman interpreta a una joven llamada Katrina que busca al padre que nunca conoció, un veterano de la Segunda Guerra Mundial. Va de su Australia natal a Inglaterra, y de ahí a Bangkok. Un joven foto-reportero la ayuda en sus indagaciones y ella acaba enamorándose de él. Pronto llega el desengaño: coloca drogas en su equipaje que son detectadas en un control en el aeropuerto cuando ya iba a abandonar el país tailandés.

Teme ser condenada a pena de muerte mientras espera juicio en la cárcel de Bang Kwang, o sea, en el Bangkok Hilton que da título a la serie. Entre rejas, soporta humillaciones y degradaciones varias mientras duerme junto a otras presas en el suelo de una inmunda celda compartida surcada por hileras de cucarachas. Pero peor es el destino que le aguarda a otras compañeras, aquellas que son fusiladas en el propio patio.