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Jesulín y César Cadaval celebran haber sido los mejores en la prueba de eliminaciónTVE

MasterChef Celebrity

Jesulín, de «la ducha de María» al baño de masas

El torero sale por la puerta grande de la prueba de eliminación, donde cayó Genoveva Casanova

El primer capítulo de la octava edición de MasterChef Celebrity pasará la intrahistoria de la tele porque fue en el que el inventor de «im-presionante» acuñó un nuevo término, esta vez de cuatro palabras: «la ducha de María». ¿Definición? Pues la misma que el «baño de María» de toda la vida. Risas aparte (las hubo, y muchas, cuando el torero dijo lo del baño fruto de su ignorancia culinaria), Jesulín salió indemne de la primera criba, que tuvo como gran perjudicada a Genoveva Casanova, la ex de Cayetano Martínez de Irujo. Hablando de jinetes, esto acaba de arrancar pero ya tenemos caballito ganador, que es como bautiza el chef Jordi Cruz a los grandes favoritos.

En la primera prueba se presentaron en los fogones Raquel Medroño y Miguel Ángel Muñoz, que propusieron unos platos muy difíciles para unos recién aterrizados. Así que se la pagaron la mayoría. A la cabeza del comando fracaso, Genoveva Casanova: «Es agua y vino blanco», juzgó su plato el chef catalán, que lo definió como el «más soso» de los once años de MasterChef. Y no estaba hablando de sal, no.

Fue en esta prueba en la que Jesulín soltó lo de «la ducha de María», causando el primer momento hilarante de la edición.

Señalada como mejor propuesta fue la del moranco Jorge Cadaval, pero seguida a menos de una cabeza por la de Álvaro Muñoz Escassi, que es el «caballito ganador» citado en el primer párrafo. Brilló también el jinete («prefiero cocinar a comer», declaró su pasión) en la prueba de exteriores, en la que los vencedores como él llevaron mandil rojo. El azul, el de los derrotados, lo vistieron Blanca Romero, César Cadaval, Toñi Moreno, Eduardo Casanova, Genoveva Casanova, Jesulín de Ubrique y Miguel Londoño, que se enfrentaron a la prueba de eliminación. El diestro escuchó de sus compañeros gritos de «torero, torero»; todo un baño de masas...

Toñi Moreno llora en la prueba de eliminaciónTVE

El humorista y el torero fueron los mejores de un reto sazonado con muchas lágrimas. De Toñi Moreno y de Blanca Romero. Ambas frustradas con sus platos. «Soy la Bustamante de esta edición», llegó a proclamar la primera. No las salvó la campana, sino el exceso de chile en el plato de la mexicana. Todo el que lo probó se sintió un dragón de cuento.

Así que se fue Genoveva. Eran las dos y diez de la madrugada cuando eso ocurrió, cuando acabó la primera gala de MasterChef. La España que madruga ya llevaba mucho tiempo dormida. La televisión pública tendría que meditar sobre este particular. Pasan los años y la promesa de racionalización horaria de MasterChef sigue sin cumplirse, por mucho que se reclame al Defensor del Espectador.