Fundado en 1910

Un plano de Ciudadano Kane

Historias de película

El garrafal error de guion de ‘Ciudadano Kane’

El fallecido crítico Carlos Pumares retiraba la condición de obra maestra a la película de Orson Welles por este fallo

Es la película que suele encabezar las listas más canónicas de las mejores películas de la historia del cine, pero el recientemente fallecido Carlos Pumares le retiraba la condición de obra maestra por un fallo de guion. Hablamos de Ciudadano Kane.

Estrenada el 1 de mayo de 1941 en el RKO Palace de Broadway, en Nueva York, la película dirigida por un joven (25 años) Orson Welles está inspirada en la vida del magnate de la prensa William Randolph Hearst. El filme arranca con la escena de la muerte de Kane, al que escuchamos decir su última palabra: «Rosebud». Una bola de cristal en la que se simula una nevada le cae de la mano y se rompe al golpear contra el suelo. A continuación, una enfermera entra en la habitación. Gran parte del metraje de la película lo ocupa la investigación de un periodista, Thompson, al que le ordenan descifrar qué significa la palabra de marras.

En el libro Carlos Pumares. Un grito en la noche, obra de Iván Reguera y Juan José Aparicio, se incluye la explicación del creador del programa Polvo de estrellas para retirar a Ciudadano Kane la condición de obra maestra: «Se ha dicho siempre que un mal guion no salva a un bien director, pero un buen guion sí salva a un mal director. Yo estoy francamente de acuerdo. Para mí, Ciudadano Kane ya no es la obra maestra que podría ser al tener un fallo de guion tan gordo. Me refiero a algo de cajón y que he recordado muchas veces: ¿quién escucha la última palabra de Kane si la enfermera abre la puerta cuando ya se ha muerto?». Este argumento lo repitió Pumares durante noches y noches, todas las que le preguntaron qué le parecía la película de Welles.

Plano de 'Ciudadano Kane' donde el protagonista dice 'Rosebud'

Iván Reguera y Juan José Aparicio añaden, de su cosecha, otro error, que se produce en la misma escena: «Eso sin olvidar el fallo de racord que supone que la bola se rompa antes de que aparezca la enfermera y que uno de los siguientes planos sea el de ella desde el punto de vista de la bola».

La enfermera entra en la habitación donde muere Kane

La película finaliza con el fracaso de Thompson, que admite no haber descifrado qué significa «Rosebud». «Si hubieses averiguado el significado de Rosebud, eso lo habría explicado todo», le dice una mujer. Y él responde: «El señor Kane fue un hombre que tuvo cuanto quiso y luego lo perdió. Puede que Rosebud fuese algo que no pudo conseguir, o algo que perdió. De todas formas, no lo hubiese explicado. No creo que una palabra puede explicar toda una vida. No. Rosebud no era más que una pieza que falta en el rompecabezas. La más importante».

Varias, las menos valiosas, son quemadas en una caldera. Una de ellas es el trineo que el magnate usó de niño, que lleva rotulada la palabra «Rosebud». En realidad, significa otra cosa: «Yo sé que Rosebud era como William Randolph Hearst llamaba al clítoris de Marion Davis», solía remarcar Carlos Pumares. Fue Herman Mankiewicz, guionista de la película junto con Orson Welles, el que tuvo la ocurrencia de que esa fuese la última palabra de Kane/Hearst.