La Ley del Cine, la película de nunca acabar de Iceta que ahora dirige Urtasun y pone el foco en las ayudas

En la lista de promesas incumplidas de Miquel Iceta durante su etapa como ministro de Cultura –en consonancia con el anterior Gobierno de Sánchez del que formó parte–, ocupa un lugar preferente la Ley del Cine. Iceta ha dejado su cartera de ministro sin que la Ley del Cine y de la Cultura Audiovisual llegara a votarse en el Congreso de los Diputados. Y eso que transcurrieron casi dos años desde que adelantó, en septiembre de 2021, que la ley estaría lista a finales de 2022 hasta la convocatoria de elecciones generales para el pasado 23 de julio anunciada por Sánchez.

Ahora su sucesor en el cargo, Ernest Urtasun, se ha fijado como objetivo prioritario sacar adelante la Ley del Cine. «Es la primera norma que el Ministerio de Cultura quiere sacar adelante», ha desvelado el responsable institucional de la Unión de Actores, Ignacio Martín en declaraciones a Europa Press, a la salida de su reunión de este miércoles en el Ministerio de Cultura. La de este miércoles es solo una de las reuniones que ha acumulado Urtasun entre esta semana y la anterior con representantes de diferentes sectores del panorama audiovisual, como actores, guionistas, productores, distribuidores y televisiones. Entre ellos, MediaPro y Productors Audiovisuals Federats (PROA)

Ernest Urtasun, a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), ha anunciado que su ministerio trabajará para que la Ley del Cine y la Cultura Audiovisual «recoja consensos» –ya sabemos cómo entiende los consensos el Gobierno de Sánchez– y se apruebe «cuanto antes».

«Cerramos la ronda de encuentros con representantes del sector audiovisual intercambiando impresiones con prestadores de servicios, televisiones, plataformas y creadores. Desde el Ministerio de Cultura trabajaremos para que la Ley del Cine y la Cultura Audiovisual recoja consensos y se apruebe cuanto antes», ha publicado Urtasun.

La nueva Ley del Cine: ayudas y derechos de autor

Entre las peticiones realizadas a Ernest Urtasun y al Ministerio de Cultura no faltan las ayudas. Por ejemplo, el «desarrollo y blindaje» de las ayudas directas a la escritura de guiones que ha solicitado, en aras de la «profesionalización» del sector y de «la diversidad cultural y lingüística», el director general de la Federación de Asociaciones de Guionistas Audiovisuales (FAGA), Rodolf Giner, que también demanda una mayor protección de los derechos de autor.

«Hay que recuperar esa salvaguarda y que se sancionen los contratos buyout (cesión por parte de los autores y de la totalidad de los derechos de autor a cambio de un único pago)», ha afirmado Rodolf Giner a Europa Press.

El representante de la Unión de Actores, Ignacio Martín ha pedido al ministerio que incluyan en la norma «más peso en los derechos laborales» y que las películas españolas no puedan ser subvencionadas si hay deudas con los trabajadores. También ha reclamado que las asociaciones profesionales dispongan de una mayor cuota en la representación sindical.