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El gazapo de su documental que irrita a Isabel Preysler
La protagonista se ha visto obligada a matizar que no se levanta a las cinco de la tarde
Mucho se ha hablado del desayuno de Isabel Presyler, que es el punto de arranque del documental Mi navidad. Pero poco se ha comentado el gazapo que incluye, que puede llevar a pensar que la madre de Tamara Falcó arranca la jornada a una hora taurina.
El desayuno que ha dado que hablar es el compuesto por un vaso de agua caliente con lima, zumo de pomelo, kiwi, pomelo en fruta, semillas de lino revueltas en agua y agua de Jamaica, «un diurético para que no se hinchen los ojos», explicó a Pablo Motos en su paso por El Hormiguero. Añadió que ese es su menú mañanero cuando está en casa, pero que si está fuera, viajando o de visita, se permite comer cruasanes, panqueques o churros con chocolate, que es «lo que más me gusta del mundo».
En el documental la vemos desayunar con mucha tranquilidad y, a continuación, despacha con Alicia, su asistente. Hablan de revisar las copas, una a una, para eliminar las rotas y picadas. Es en ese momento en la que vemos como un reloj indica que son las cinco de la tarde, algo pasadas. Motos se lo dejó caer durante la entrevista. Fue quizá el único momento de la conversación –que fue de baño y masaje– en la que se vio a la Preysler algo incómoda. «Se olvidaron de cambiar la hora o de quitar el reloj», se defendió. «Pero yo no desayuno a las cinco de la tarde, ¡hombre!», aclaró. Admite que se acuesta tarde y se levanta tarde, sí, pero no tanto.