Los lugares más curiosos en los que los actores guardan sus premios
Las estrellas de Hollywood se atreven a conservar su galardón en el baño, en la cocina e incluso en un gallinero
Conseguir un premio Oscar es todo un logro, teniendo en cuenta lo complicado que supone que la Academia no solo nomine a los aspirantes, sino que se decida por uno de los candidatos para hacerle entrega de la ansiada estatuilla. Sin embargo, esto no parecer ser una razón de peso para que, una vez otorgado el prestigioso galardón de Hollywood, los actores lo conserven un lugar privilegiado. De hecho, muchos de ellos han sorprendido guardándolos en sitios de lo más inesperados, como el baño.
Es el caso de Kate Winslet. La actriz, que saltó a la fama por su papel en Criaturas celestiales en 1994, veía recompensado su trabajo a lo largo de los años en 2009 con un Oscar por The Reader. Nominada seis veces antes por la Academia, quien diera vida a Rose en Titanic se alzaba finalmente con el esperado premio y decidía colocarlo en el aseo de su domicilio con un justificado motivo. Según ella, el objetivo era que todos los que pasaran por el baño lo tomaran en sus manos y dieran su propio discurso frente al espejo.
«Siempre puedes saber si alguien lo ha hecho, porque permanecen allí un poco más de tiempo después de tirar la cadena», confesó Winslet en 2015 en declaraciones a The Wall Street Journal. «Salen con las mejillas ligeramente sonrosadas. Es histérico», concluyó. Desde luego, su divertida ocurrencia fue de lo más comentada. Al igual que la de su compañero de profesión, Russell Crowe, que asegura conservar su Oscar en un gallinero.
Concretamente, el actor, que fue galardonado por su papel en Gladiator en 2001, ha confirmado en varias ocasiones que tiene el ilustre premio en un gallinero situado en su rancho de Australia. Una decisión muy curiosa, teniendo en cuenta la presencia de los animales en torno a la estatuilla dorada. Por su parte, Jared Leto, que en 2014 se hizo con el Oscar por su papel secundario en Dallas Dallas Buyers Club, revelaba en 2021 que llevaba tres años sin saber dónde se encontraba el suyo.
Si en primer lugar el intérprete sorprendía indicando que lo había guardado en la cocina de su casa, custodiado por «mantequilla vegana y un paquete de palomitas», tiempo después Leto confirmaba que, a causa de una mudanza, había perdido de vista el galardón. «Espero que esté en buenas manos donde sea que esté», aclaró. Y quien sí tiene a buen recaudo sus dos Oscars es Tom Hanks, aunque no en el lugar donde cabría esperar.
Premiado por sus papeles en Philadelphia y Forrest Gump, el actor explicaba que guardaba los galardones en una estantería, colocados detrás de sus premios de fútbol y al lado del trofeo a la mejor madre del mundo. Al menos los dejó en su casa puesto que estrellas como Gwyneth Paltrow y Angelina Jolie declararon no querer tener cerca sus estatuillas después de conseguirlas. «No lo he vuelto a ver desde el día en que lo gané. No creo que aferrarse a los premios sea bueno», dijo la exmujer de Brad Pitt.
Dustin Hoffman fue otro de los intérpretes que guardó sus Oscars en un lugar donde no pudiera verlos, aunque después de años de terapia consiguió albergarlos en su estudio. No como Jamie Foxx, que optó por dejar su premio por Ray en el despacho de su agente porque su vivienda estaba siempre muy desordenada. Cate Blanchett, sin embargo, decidió poner los suyos encima de su piano, para que todo aquel que fuese a su casa pudiese hacerse una foto junto a ellos.