Fundado en 1910

Pablo, este sábado en 'Pasapalabra'Antena 3

Antena 3

La explicación al tremendo error de Pablo Díaz en 'Pasapalabra'

La normativa de la Noche de campeones, distinta al formato diario, hizo caer al tinerfeño en la imprudencia

Que Pablo Díaz pierda con Luis de Lama puede catalogarse como una sorpresa, puesto que el violinista tinerfeño nos tiene acostumbrados a triunfar, tanto en el formato habitual de Pasapalabra, donde en julio de 2021 se llevó 1.828.000 euros de bote, como en ediciones especiales, pues recordemos que en febrero del pasado año ganó El duelo de campeones, que reunió a ocho antiguos concursantes en un torneo eliminatorio. Es una sorpresa, sí, pero tampoco una gran sorpresa, y lo decimos por dos razones: por su rival y porque las normas no son las mismas que en el programa diario.

El rival ante el que cayó fue el madrileño Luis de Lama, un estupendo concursante que en la etapa actual en Antena 3 participó en 84 programas en los que se llevó 39.600 euros. Todos ellos fueron precisamente ante Pablo Díaz, por lo que el enfrentamiento entre ellos es el tercero más repetido en la historia del programa en España. En esos 84 «roscos», el balance fue favorable a Pablo, que logró 38 victorias (45 %), empató en 26 ocasiones (30,9 %) y sufrió 20 derrotas (23,8 %).

Diferentes normas

La segunda razón que explica la derrota de Pablo es que, como hemos apuntado antes, en la Noche de campeones las normas no son iguales que en el concurso tradicional. En este último, pues pasarpalabra sin pensártelo demasiado, a poco que dudes la respuesta, porque habitualmente sobran los segundos para resolver el rosco. Pero en el formato especial en el que han competido Pablo y Luis, el hecho de ceder el turno puede llegar a penalizar en caso de igualada final en número de aciertos y errores.

Si se empata en un programa normal, los dos concursantes vuelven a participar al día siguiente sin necesidad de superar La silla azul. Pero las igualadas no se contemplan en el formato de la Noche de campeones, que se compone de dos semifinales y de final. De este modo, hay tres variables que sirven para desempatar. Por orden de importancia, vamos con ellas. La primera es que gana el que saque más aciertos en la primera vuelta. En caso de que el empate persista, el triunfo será para el que logre el turno más largo de aciertos. Y, si aún así continúa la igualada, hay una silla azul en la que solo se permite un fallo.

Las dudas de Pablo

Pablo dudó cuando el presentador Roberto Leal le planteó la letra ce, algo que muy pocas veces le habíamos visto hacer con el cronómetro en marcha. Pero se la jugó, porque quería hacer más aciertos que su rival en la primera vuelta o bien lograr una racha de aciertos larga. Además, sospechó que esa pregunta no era una de las llamadas cerrojo. Arriesgó, y se la pegó. ¿Qué habría hecho en un programa de los habituales? «Habría pasado», aseguró el propio Pablo al presentador una vez cometido el error.

Ese fallo lo dejó a los pies de los caballos: logró alcanzar los 23 aciertos y solo dejó un cerrojo sin abrir, pero Luis de Lama alcanzó después el mismo número de respuestas acertadas sin cometer errores y, lógicamente, se plantó. Esta es la explicación a una derrota sorprendente que nos ha privado del duelo Orestes-Pablo.