Las grandes polémicas españolas de los últimos años en Eurovisión
Tras el triunfo de Zorra, un sector de la sociedad celebra la desestigmatización de la palabra, mientras que otra parte de los españoles miran escandalizados el espectáculo y advierten que «mañana todas las niñas cantarán su propia vejación»
«Eres nuestra Madonna española, y te hemos descubierto», sentenció ayer Ruth Lorenzo tras el triunfo de Nebulossa en el Benidorm Fest. Sin embargo, a pesar de los halagos del jurado y el calor del público, el grupo compuesto por María (Mery) Bas y su pareja, Mark Dasousa, también ha recibido duras críticas por parte de la sociedad, especialmente en redes sociales.
Con la elección de Nebulossa para representar España la polémica está servida. Mientras un sector de la sociedad celebra la desestigmatización de la palabra «zorra», título de la canción, otra parte de los españoles miran escandalizados el espectáculo y critican «la imagen que vamos a dar como país en un evento tan seguido mandando a un representarte acorde a la deriva woke», en palabras de un usuario de la red social X (antes Twitter).
Mientras unos apelan a la «decadencia moral» y advierten que «mañana todas las niñas cantarán su propia vejación», otros celebran que TVE haya virado en los últimos años y que permita la actuación de Nebulossa cuando en 1983 se querelló contra las Vulpees por mencionar en una canción la misma palabra que este año representará España en Eurovisión: zorra.
Rigoberta y Chanel
No se trata de la primera vez que la fiesta de la música europea crea polémica entre los españoles. Sin viajar mucho en el tiempo, el año 2022 estuvo sembrado de desacuerdos entre los fans (y no tan fans) de Eurovisión.
Una de las grandes protagonistas de aquel año fue Rigoberta Bandini, cantante barcelonesa que reivindicaba la desnudez del pecho femenino, la maternidad y los valores de la mujer con su tema Ay Mamá en el Benidorm Fest. La izquierda española abanderó la desnudez de Rigoberta en el escenario, mientras que los sectores más conservadores se mostraron más reacios a esto, aunque sí alabaron la letra de la canción, toda una oda a la belleza de la maternidad.
Bandini no ganó el Benidorm Fest y la representación de España en Eurovisión recayó en el SloMo de Chanel. La cantante hispano-cubana adelantó por la derecha a las tetas de Rigoberta y a las pandeireteiras Tanxugueiras, favoritas para ganar aquella edición del Benidorm Fest, hecho que no sentó muy bien al público y tachó el concurso de 'tongo'. El principal argumento para criticar SloMo es que, además de ser reggaetonera, la canción superaba el número de palabras en inglés permitidas en Eurovisión. A pesar de las críticas, al final toda España se unió para ver triunfar a Chanel en Europa y ganar el segundo puesto del concurso musical.
La Ikurriña en 2016
Con un tinte más político, el festival de Eurovisión de 2016 estuvo marcado en España por una bandera: la ikurriña. El concurso desató la polémica en el País Vasco tras incluir la enseña independentista vasca en el listado de banderas que el público no podía mostrar en el festival, enumeración en la que constaba también la bandera del Estado Islámico.
La inclusión de la ikurriña en la lista de insignias vetadas no sentó bien a los independentistas vascos de EH Bildu, que solicitaron la retirada de la bandera del listado. Finalmente, Suecia cedió y retiró la prohibición a lucir la ikurriña en Eurovisión.
Corte de mangas en directo
En el año 2017 Manel Navarro y Mirela emergían como los principales contendientes. Mientras uno gozaba del respaldo del jurado profesional, la otra conquistaba el favor del público, siendo la más votada. Sin embargo, surgió controversia cuando los espectadores consideraron injusto que los profesionales tuvieran la última palabra.
La polémica se intensificó, llegando al punto en que el artista seleccionado realizó un corte de mangas al público. Además, Xavi Martínez, uno de los miembros del jurado, se vio envuelto en amenazas de muerte y sufrió una agresión por haber elegido a Manel para representar a España en Eurovisión.
El Chikilicuatre
2008 fue el primer año en el que los candidatos podían presentarse por internet, oportunidad que el cómico David Fernández aprovechó para gastar la broma que más lejos ha llegado en la historia de España. Como en aquel año la decisión final la tenía el voto del público, el Chikilicuatre –personaje que encarnó el colaborador de Buenafuente– se coronó como representante de España en Eurovisión, logrando la máxima puntuación posible en su elección.
Fernández actuó ante Europa con una guitarra de juguete y cantando una canción que decía cosas como «el chiki-chiki mola mogollón, lo bailan en la China, también en Alcorcón» y cuyo estribillo canta: «Y el chiki chiki se baila así; Uno: el brikindans; Dos: el crusaíto; Tres: el maiquelyason; Cuatro: el robocop». A pesar de lo cómico de su actuación, el Chikilicuatre quedó décimo en el festival.