Marc Márquez, este miércoles en 'El Hormiguero'
‘El Hormiguero’
La curiosidad física que comparten los hermanos Márquez
«El primer rival es el compañero de equipo, pero en este caso es diferente», admitió Marc
Los hermanos Márquez fueron a divertirse a El Hormiguero. Mantuvieron un divertido pique, como el que tienen en la pista a lomos de la misma moto, la Ducati Desmosedici. «El primer rival es el compañero de equipo, pero en este caso es diferente», admitió el mayor, Marc. Porque, en este caso, «siempre te intentas ayudar».
Aún así, cuando coincidieron en el box del equipo, llegó el primer problema: «Toda mi carrera la he hecho en el lado derecho», comunicó. Pero ese lado estaba ocupado por Álex, el pequeño de los Márquez: «Tu hermano no lo quiere cambiar», le comunicaron. «Somos supersticiosos los pilotos, queremos el lado en el que siempre nos ha ido bien», justificó Marc. «Se te había acabado la suerte», respondió entre risas su hermano.
Álex Márquez, este miércoles en 'El Hormiguero'
Así recuerda el mayor su adiós a Honda: «Costó mucho la decisión, pero, una vez que la tomas, es la buena. Hay relaciones de amistad que están allí, patrocinadores de toda la vida… En la carrera de un deportista a veces hay momentos límite que necesitas hacer esto para continuar tu carrera. Tocaba». Está en período de adaptación a la Ducati: «Cada moto tiene sus secretos para hacerla funcionar. Yo vengo once años pilotando en el mismo estilo de moto. Ahora me tengo que esforzar en muchas partes del circuito para no tener los vicios de la otra moto», explicó Marc. De ahí que de los cinco días de entrenamiento conjunto, en cuatro se ha impuesto Álex.
Marc y Álex, en 'El Hormiguero'
Hicieron pronósticos cruzados. Para Marc, Álex tiene que marcarse el objetivo de llegar al top cinco. «Si tiene la paciencia que creo que tendrá puede llegar muy arriba a final de año. Que no se caliente», dijo el pequeño del mayor. «Llevos dos años sin ganar una carrera, no puedo pretender afrontar un año pensando en ganar el Mundial», admitió Marc.
Físicamente son diferentes. «Tú eres más tirillas», le dijo Motos al pequeño. Y entonces revelaron una curiosidad. Marc mide 169 centímetros. Álex, 180. Pero pesan exactamente lo mismo: 65 kilos.
Viven juntos: Marc, su novia y Álex. Es «por los perros», explicaron ambos. Porque son de los dos y el pequeño ha amenazado con llevárselos en caso de que se vaya.
