La gala de los Oscar logra la mayor audiencia televisiva desde 2020
Con una audiencia de 19.5 millones de televidentes, el evento marcó un aumento significativo en comparación con el período de la pandemia, pero aún está lejos de alcanzar las cifras de hace una década
La edición número 96 de los premios Oscar atrajo a una audiencia de 19,5 millones de televidentes, según informes iniciales, gracias al triunfo de la taquillera película Oppenheimer, dos actuaciones en vivo de Barbie y un hilarante número protagonizado por el actor John Cena casi desnudo.
La audiencia de este año casi duplicó la cifra alcanzada durante la época de la pandemia, cuando solo logró captar 10,4 millones de espectadores, aunque aún está lejos de los 40 millones que solía registrar hace una década.
Oppenheimer, el drama dirigido por Christopher Nolan sobre la bomba atómica, se llevó siete estatuillas, incluyendo mejor película, mejor director y mejor actor para Cillian Murphy. Mientras tanto, Pobres criaturas se alzó con cuatro Oscar, incluyendo el premio a la mejor actriz para Emma Stone.
La noche estuvo marcada por la destacada actuación de Ryan Gosling, quien interpretó I'm Just Ken, la emotiva balada de Barbie. El humor del presentador Jimmy Kimmel fue bien recibido, al igual que la aparición de John Cena, quien entregó el premio al mejor vestuario luciendo apenas unas sandalias.
Variety describió la participación de Gosling como «maximalista y contagiosamente cómica», agregando que fue una manera ideal de canalizar la energía positiva de la ceremonia.
Una gala con grandes momentos
La actuación musical de Billie Eilish y Finneas con la canción ganadora de la noche, What Was I Made For?, de la banda sonora de Barbie, fue otro punto destacado, al igual que la interpretación de músicos indígenas del tema nominado de la película Los asesinos de la luna.
Los Oscar de este año se beneficiaron de tener entre las nominaciones a dos éxitos globales como Oppenheimer y Barbie, el fenómeno Barbenheimer que dominó los cines en 2023 y que fueron los claros protagonistas de la gala. Prácticamente en todo momento hubo alguna referencia a estas dos películas.
El diario Los Angeles Times elogió los «ruidosos y estridentes Óscar», destacando su dosis de humor, la celebración de la historia del cine y la moderada presencia de comentarios políticos. Donald Trump fue uno de los millones de espectadores que sintonizaron la transmisión, y aunque publicó una crítica negativa del presentador en sus redes sociales, Kimmel la leyó en vivo durante la última parte del evento y se convirtió en otro de los momentos más comentados.
Además de las risas, la ceremonia también incluyó referencias sentidas a las huelgas de Hollywood, al conflicto en Gaza y a la guerra en Ucrania.