Fundado en 1910

Ana Rosa Quintana, en el programa de este lunes 29 de abril en TardeARTelecinco

Televisión

Ana Rosa, sobre la 'regeneración democrática' de Sánchez: «Suena a enajenación»

La presentadora de TardeAR se muestra crítica con el presidente y su decisión de quedarse

Ana Rosa empezó el programa de este lunes de TardeAR por todo lo alto. «Vaya mañanita y vaya cinco días que hemos tenido. Victimismo al cuadrado», aseguró la presentadora sobre la decisión de Pedro Sánchez de continuar como presidente del Gobierno.

«Mi apuesta fue 'no es no' y el resultado ha sido 'yo es yo’. Pedro Sánchez, convertido en Luis XIV, reaparece señalando ‘la democracia soy yo’, mostremos al mundo cómo se defiende la democracia», continuó Ana Rosa. «Tras someternos a una farsa de cinco días, Sánchez ha ido a ver al Rey. ¿Para qué? ¿Para decirle: 'no voy a dimitir'? El presidente ha anunciado un gato pardo, en el que va a cambiar todo, para que todo siga igual». Ana Rosa no se calló nada, ya que su monólogo, donde expresó las sensaciones que le ha dejado Sánchez con su decisión, duró alrededor de tres minutos.

Ana Rosa realizó un resumen de los hechos y catalogó la carta de Sánchez como «una carta de amor donde dice que estudia marcharse por una campaña de la fachosfera que incluye a jueces, a medios y a la oposición. Cinco días después reaparece lanzando un mensaje peronista, anunciando que se queda, para liderar una respuesta contra el movimiento reaccionario mundial». Según Ana Rosa, «los inventores del escrache se quejan del acoso». «Hace cinco días no merecía la pena quedarse, pero hoy se queda para salvarnos a todos», añadió.

Ana Rosa afirmó que la movilización a la que se refirió Sánchez en su discurso «no llega a un grupete de amigos», mientras que sus socios «piden el control de los jueces y de los medios de comunicación». La presentadora de TardeAR comentó que al final su decisión no era por amor, sino un simple «cálculo político». Ana Rosa aseguró también que el presidente no diferencia «la democracia del gobierno». «Los periodistas seguiremos contando lo que el poder no quiere que se cuente porque es nuestra obligación, no nos vamos a poner una mordaza», zanjó Ana Rosa.