Djalminha, Raúl y la 'lambretta': «¿Pero por qué eres tan tonto?»

Ocurrió el 6 de febrero del 2000, el año que el Dépor ganó la Liga. El conjunto coruñés recibía en Riazor al Real Madrid de Casillas, Hierro y Raúl que tres meses después alzaría la Champions. En aquellos tiempos ese campo era una tortura para el equipo merengue, pues no vencía en Liga desde 1991, y no lo haría hasta el taconazo de Guti en 2010. El conjunto local era líder del campeonato y los madrileños marchaban en la cuarta plaza a cuatro puntos. El Dépor arrolló (5-2), pero más allá del resultado, el partido pasó a la historia por lo nunca visto: la lambretta. El episodio se recuerda en el documental Puro Djalminha, que este lunes estrenó Movistar Plus+.

La escuadra coruñesa se adelantó en el minuto 6 con un tanto de Makaay. Poco después, llegó La Jugada. «Mi lambretta es distinta de todas. La mía sale por detrás», dice Djalminha en el documental mientras se señala la espalda. «Los demás la hacen todos por el lado. Ningún jugador ha hecho una lambretta como la mía. Ninguno», remarca. De hecho, nadie bautizó como «lambretta» esa jugada en ese momento porque era lo nunca visto en estos lares. Fue el propio Djalminha el que, al día siguiente, le aclaró a un periodista (en concreto, al firmante de este reportaje) cómo se nombraba esa jugada. También le contó que la fantasía de Jason Williams, el mago de la NBA que asombraba en los Sacramento Kings, le había inspirado. Al igual que el brasileño, Chocolate Blanco desconcertaba a menudo a sus rivales con jugadas muy imaginativas.

No fue una improvisación: «Yo entrenaba mucho, la sabía hacer muy bien», dice el brasileño en Puro Djalminha. En el estreno del documental en la ciudad coruñesa, tres semanas atrás, el futbolista reveló que practicaba esta suerte futbolística desde los 13 años.

En realidad, intentó un autopase que resultó ser un pase a Víctor Sánchez del Amo: «Cuando yo controlo el balón, veo todo el equipo del Madrid salir. Y Víctor pega al balón, y Roberto [Carlos] está ahí y lo bloqueó», rememora el protagonista del documental.

El nulo entusiasmo de Irureta

Djalminha no era santo de la devoción de Jabo Irureta, entrenador del Dépor. En el documental, el brasileño recuerda que en su primera pretemporada con el técnico vasco éste le reprochó sus estadísticas de la campaña anterior, en la que había sido el máximo goleador de un equipo irregular. «Sus números no han sido buenos», le espetó Jabo. «Tú tienes más derrotas que victorias en tu currículo, y yo no», reaccionó el brasileño. Su relación no empezó bien y a partir de ahí fue a peor (el punto álgido fue el famoso cabezazo). De hecho, Irureta resta miga a la lambretta: «¿Fue gol? No», se pregunta y se responde en el documental.

No, no fue gol. Pero sí lo fue el que Djalminha anotó en el minuto 17, que supuso el 2-0. Morientes acortó distancias en el 36. «Al final del primer tiempo el Madrid empata, y ellos cogen el balón rápido y lo ponen en el medio», recuerda el brasileño, quien quitó el balón del punto central. Fue en ese momento cuando la estrella blanca, Raúl, se dirigió a Djalminha. «Yo tengo un respeto muy grande por Raúl, pero yo, dentro del campo, no tenía mucho respeto a nadie», apunta el 8 deportivista en el documental.

Raúl no se quedó callado: «Es que tú juegas tan bien… ¿Pero por qué eres tan tonto? Haces tonterías». Djalma replicó así al mito madridista: «Así es el fútbol. Tú no juegas tan bien y juegas en el Real Madrid».

Esta del documental es una versión suavizada. La que Djalma contó en su día al autor de este reportaje es algo diferente:

Raúl: ¿Pero tú para que haces esas tonterías?

Djalminha: Porque yo soy futbolista. Tú metes goles, pero yo soy futbolista.