Fundado en 1910

Juan Mateo Fernández de Córdova, hijo de los marqueses de GrañinaTelecinco

Televisión

Juan Mateo, hijo del marqués de Los Galindos: «Mi padre vio los crímenes y los tapó»

La serie El Marqués, que emite Telecinco, recrea los asesinatos cometidos en la finca de Los Galindos en 1975

El crimen de Los Galindos, cortijo de Paradas (Sevilla) donde fueron asesinadas cinco personas, jornaleros de la finca, el 22 de julio de 1975 y que en los juzgados se cerró en 1988 sin resolver quién o quiénes eran los asesinos. Prescribió en 1995. Era la España convulsa del final del franquismo, se estaba muriendo Franco, se activó por parte de Marruecos la «marcha verde» y ahora, 49 años después, la productora Unicorn Content (Ana Rosa Quintana) ha lanzado en Telecinco una serie de ficción titulada El Marqués. En seis capítulos, bien guionizados y puestos en escena, se pretende reconstruir lo que ocurrió y llegar a un final y ¿conocer la verdad en la ficción?

La serie se rodó en distintos pueblos de Sevilla porque los habitantes de Paradas (Sevilla), lugar de los asesinatos, se negaron a que se utilizara el pueblo para el rodaje. Begoña Álvarez, Ignacio del Moral y David Planell dirigen un elenco de actores andaluces que se mueven con soltura y credibilidad (destaca la actuación de Juan Fernández como Alejandro) y en los tres primeros capítulos han logrado que más de un millón de espectadores sigan las intrigas del drama criminal de la época: el primero tuvo 1.373.000 espectadores y un 13 % de share; el segundo, 1.047.000 y un 10,9 %; y el tercero, 1.025.000 espectadores y un 11 %.

La verdad de los Galindos

Telecinco ha querido completar la noche de El Marqués emitiendo tras la serie un programa especial, La verdad de Los Galindos, presentado por Verónica Dulanto, donde se intenta, sin ficción, conocer a los asesinos… que aún andan sueltos. La estrella del especial es el hijo del marqués de Grañina, Juan Mateo Fernández de Córdova, que en una de sus primeras intervenciones sentencia: «Mi padre no es el asesino, pero estuvo presente en los crímenes y los tapó». Los analistas, Mariló Montero y Pepe Fernández, periodistas; José María Garzón, criminólogo; Toñi Moreno, presentadora de televisión; y Joaquín Torres, juez de paz de Paradas desde 1982… se quedaron mudos. Y el hijo del marqués, que en 1975 tenía 15 años, continuó con sus veredictos: «El asesino podría seguir vivo».

Los invitados advirtieron que podían ser más los asesinos, hasta tres personas. Algo que no niega el hijo y añade: «Mi padre hizo mal en no decir toda la verdad desde el principio». Los invitados de inmediato le interrogan: «Dé los nombres…».

«No puedo –comenta el hijo del marqués–, quizás en mi segundo libro». Verónica, la presentadora, y los rótulos del programa insisten en que «va a contarlo todo con pelos y señales...», pero no quiere dar nombres porque sigue investigando.

El principio fue caótico. «La investigación policial, una feria», comenta Juan Mateo. Y las grandes incógnitas: ¿Por qué no se registró ese día la casa del marqués? ¿Por qué los de televisión limpiaron la sangre del suelo para que no se mancharan los cables? ¿Por qué no se investigó más dónde estaba el dinero? ¿Por qué el administrador y su hijo, en la casa el día de los crímenes, abandonaron Los Galindos unos días después y nunca más volvieron? El administrador, Antonio Gutiérrez, íntimo amigo del marqués, era un personaje «frío y calculador». Esta descripción hizo que Garzón, el criminólogo, advirtiese: «Pues en casi todos los asesinatos se califica al autor de frío y calculador...».

Tensión en el plató

Descartados los móviles del crimen que se barajaron los primeros años: «Legionarios que había por la zona, asunto de drogas, crímenes pasionales, solo queda la herencia millonaria». Pero Toñi Moreno quiere ahondar en un asunto escabroso y le pregunta a Juan Mateo Fernández de Córdova, hijo del marqués: «Hay un rumor en el pueblo de que el padre biológico de Juana, la mujer del capataz de la finca, era el abuelo. Usted –le espeta al marqués–, se haría la prueba de ADN?» Fernández de Córdova saltó a la yugular: «Eso es falso. Una barbaridad. Se llevaban 13 años. Era imposible. No voy a aceptar eso». Lo cierto es que en el tercer programa de La verdad de los Galindos hubo dos ausencias: Toñi Montero, sustituida por Juan Luis Galiacho, y el propio marqués, que entró por teléfono, tres minutos, aunque había confirmado su asistencia al programa.

El hijo del marqués, Juan Mateo Fernández de Córdova, en la actualidad es un empresario sevillano de 59 años, sigue hablando de su libro y del que escribirá una segunda parte del crimen de los Galindos en el que ya se sabrán –dice– quiénes fueron los asesinos (de momento un tal Curro, nombre falso y algunos más). Este programa, La verdad de los Galindos, no acaba de asentarse entre los seguidores del drama criminal. El primer día fue seguido por 758.000 espectadores y un 14,5 % de share; el segundo bajó hasta los 506.000 seguidores y un 11 % de share y el tercer programa alcanzó los dos dígitos de share, el 10 %, pero solo lo vieron 420.000 espectadores.

Mariló Montero resume: «Mientras no haya respuestas claras, no se hará justicia». El juez de paz, Joaquín Torres, no parece estar muy convencido de las explicaciones del hijo del marqués y no entiende «cómo han pasado entre diez y quince jueces por este caso». Un sumario de 1.000 folios que desapareció al incendiarse las dependencias judiciales de Marchena, pero la productora del programa dice que lo ha encontrado y va recuperando algunas partes.

El Marqués, la serie de ficción que emite Telecinco todos los miércoles, ha logrado un seguimiento fiel de más de un millón de espectadores. Ciudadanos que conocieron el crimen de Los Galindos hace 49 años y otros que siguen todas las series de crímenes, uno de los géneros más demandados en las plataformas de televisión.