Delia Balmer (Ana Maxwell), enfermera, conoce a John Sweeney (Shaun Evans) en un garito londinense en 1991. Es un flechazo instantáneo, que los une como pareja. La personalidad artística e inconformista de Sweeney desaparecerá rápidamente, y mostrará su lado violento, oscuro y manipulador. Finalmente, admite haber asesinado a su anterior pareja y es arrestado. Tras el error fatal de los jueces, quienes finalmente consideran al sujeto no peligroso, la policía seguidamente lo libera bajo fianza. La producción está basada en la novela autobiográfica de Balmer, quien trató con esta obra de dar visibilidad al fallido sistema judicial respecto a los casos de violencia de género.