Antonio Banderas sorprende en ´El Hormiguero´ desvelando sus problemas financieros: «Trabajo a pérdidas»
El actor también se mostró muy crítico contra la censura y afirmó que «hay que proteger la libertad de expresión»
Antonio Banderas cerró la semana de El Hormiguero con una visita en la que, acompañado por Marta Ribera, presentó su nuevo proyecto, el musical Gypsy. El espectáculo, que se estrenará el próximo 25 de octubre en el Teatro del Soho CaixaBank de Málaga, es la nueva apuesta de Banderas como director y productor. Pero más allá de promocionar su obra, el malagueño aprovechó su paso por el programa para hacer una profunda reflexión sobre la libertad artística y los desafíos a los que se enfrentan los creadores en la actualidad.
Uno de los momentos más contundentes de la entrevista llegó cuando Banderas se refirió a la autocensura y el impacto de lo políticamente correcto en la industria cultural. «Estamos viviendo un momento complejo», afirmó el actor, quien no dudó en denunciar que muchas de las películas que ha hecho en el pasado, algunas con Pedro Almodóvar, serían imposibles de rodar hoy. «La autocensura está penalizando la creatividad», añadió con seriedad. Según Banderas, el miedo a la reacción de las «masas» en redes sociales está coartando a muchos creadores. «Lo políticamente correcto se está cargando muchas iniciativas y muchas formas de expresión libre», lamentó.
El actor no se quedó solo en la crítica. Insistió en que la libertad de expresión debe prevalecer, incluso cuando las obras artísticas generen molestias personales. «Tengo que defender la libertad de expresión y la libertad artística por encima de todo, aunque me moleste. Y hay muchas cosas que me molestan, pero no me importa, porque sé que el principio de la libertad de expresión tiene que estar por encima de eso», sentenció el intérprete malagueño. Sus palabras resonaron con fuerza en el plató y abrieron el debate sobre los límites de la creación artística en tiempos donde las plataformas digitales pueden encumbrar o destruir obras con una velocidad vertiginosa.
Sus pérdidas económicas
Banderas también reveló detalles sobre la titánica tarea que supone poner en marcha un proyecto como Gypsy en su propio teatro, el Teatro del Soho en Málaga. Según explicó, la superproducción es la más ambiciosa que ha montado en este espacio, pero también la más arriesgada desde el punto de vista económico. «Somos una empresa privada, no tenemos subvención pública y trabajamos a pérdidas», confesó con absoluta transparencia. «Aunque llenemos el teatro todos los días, vamos a perder dinero», reconoció, dejando boquiabierto a Pablo Motos, quien no pudo evitar expresar su sorpresa: «Antonio, yo me he quedado en pausa cuando has dicho lo de que haces el teatro para perder».
Sin embargo, Banderas tiene claro que su proyecto en el Soho no está motivado por el dinero, sino por una visión más profunda sobre su vida y su legado. Tras haber sufrido un incidente cardíaco, el actor explicó que su perspectiva sobre el éxito ha cambiado. «El éxito en la vida es hacer lo que quieres hacer, como lo quieres hacer y con la gente que lo quieres hacer», reflexionó. Para Banderas, su teatro en Málaga es una forma de realizar sus sueños y contribuir al panorama cultural de su tierra, independientemente de las pérdidas económicas. «Hacemos teatro para perder», reiteró, subrayando que lo esencial para él es haber llevado a cabo el proyecto con autenticidad y pasión.
Hollywood y el regreso a las raíces
En otro momento de la entrevista, Pablo Motos le preguntó sobre su experiencia en Hollywood, un lugar que ha catapultado su carrera internacional pero del que decidió alejarse tras su separación de Melanie Griffith. «Yo no viví ese lado tan oscuro de Hollywood», explicó Banderas, quien afirmó que la vida familiar que llevaba junto a Griffith lo protegió de los aspectos más superficiales y tóxicos de la industria. Tras el fin de su matrimonio, Banderas se mudó a Europa, primero a Londres y luego a su Málaga natal, donde está volcado en el Teatro del Soho.
«No he vuelto a Málaga a construir una especie de ataúd donde me voy a meter hasta que me muera, sino que he vuelto a construir una cuna», señaló el actor, en referencia a su deseo de seguir creando proyectos culturales de gran envergadura en su ciudad.