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Sánchez y Begoña Gómez, desayunando

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'Moncloa: cuatro estaciones': la propaganda de Sánchez hecha serie

El presidente quiso vender su documental a la televisión privada, pero ninguna ha querido emitirlo

El diario El País anunciaba la adquisición, sin dar cifras, de la docuserie Moncloa: Cuatro estaciones. Dedicada a los jardines, edificios y moradores de la Moncloa, con su presidente Pedro Sánchez, en el centro del poder.

El País, para que tuviese gancho la serie, no dudó en «venderla» como «el documental maldito que nadie quiso emitir». Acertó. El contenido no aguanta un minuto en una televisión privada, por eso no lo compraron. Y lo de maldito quizás sea porque se lo han colado con calzador, porque la serie es «ad maiorem Sánchez gloriam» («Para la mayor gloria de Pedro Sánchez»).

Sólo los privilegiados suscritos al País premium pueden visionar a Pedro Sánchez, paseando por los jardines monclovitas, despidiéndose de sus perros, asistiendo a reuniones con la legión de asesores que van pasando según el tema a tratar, o desayunando con su esposa Begoña Gómez, con la cadena SER de fondo:

– Sánchez; «No voy a desayunar mucho porque ayer con la cena tengo suficiente».

– Begoña: «¡¿Qué dicen los periódicos hoy?!».

– Sánchez: (con las cabeceras de los diarios La Razón, El Mundo y ABC, sin El País) responde: «Pues hablan de Finlandia, Suecia, el ingreso en la OTAN». Y cuenta en el vídeo: «Y comentamos las cosas que vamos a hacer a lo largo del día». Interesante comentario.

- Frío desayuno, sin las hijas. Pedro Sánchez prohibió a las productoras, The Pol y Secuoya, que sus dos hijas apareciesen en la serie, pero sí cita a la mayor hablando con un colaborador y con orgullo: «Mi hija mayor saca unas notas… Estoy sorprendido. Hace psicología».

La serie se grabó entre 2022 y marzo de 2023. Ha quedado desfasada. Ya no ocupan en la actualidad sus puestos: Adriana Lastra, Miquel Iceta, Nadia Calviño, Alberto Garzón, José Luis Escrivá, Oscar López… ni Franganillo que ha pasado de La 1 en la serie a Telecinco.

Lo más llamativo de los dos primeros capítulos son los trabajadores de la Moncloa y cómo están distribuidos por el complejo. Desde las cocinas a los departamentos más sofisticados…¡como el búnker que creó Felipe González! ¿Es positivo que aparezcan sus rostros en televisión?

El más entrañable de la serie es Iñaki Murillo, coordinador de logística, que igual aparece sacando platos de la cocina, abriendo puertas de los coches de las autoridades o recogiendo regalos de presidencia. Su padre le pasó el testigo. Tendrá muchos fans.

Para los sanchistas y sus seguidores socialistas los dos capítulos cuentan cómo afrontan en Moncloa la invasión de Ucrania, cómo se preparan los consejos de ministros; como logró Sánchez en una conversación de minutos con Macron, presidente francés: la «excepción ibérica» sobre la energía; cómo se preparó la cumbre de la OTAN en España y su éxito: la magnífica relación con Biden y EEUU (año 2022). Y se descubren palabras utilizadas en el argot monclovita; a los asesores presidenciales que negocian con asesores de otros países, se llaman «sherpas» y cuando llegan mandatarios y deben bajarse de sus vehículos se denomina: «desencochar».

Más de 200 comentarios ya registra El País, sobre la serie…con polémica. Los suscriptores que no son premium están frustrados; otros, encantados con los capítulos, pero mayoritariamente echan pestes. El más ocurrente: «Jo, en cambio a Peinado le decía que no quería cámaras…»