La semana de la tele
Iker Jiménez, Ana Rosa y Joaquín Prat se mojan a favor de la libertad; Évole, a lo suyo
Esta semana algunos presentadores de programas se han mojado y mucho para dejar claro su posicionamiento ante la presión que sufren sus compañeros o ante los errores, que se cometen en sus espacios y… no precisamente en la red X, de la que huyen despavoridos algunos medios, periodistas o tertulianos porque ahora Musk es el demonio con patas.
Iker Jiménez y Carmen Porter, presentadores de Horizonte que emite Cuatro, aparecieron en pantalla con la tranquilidad que da saber que hacen las cosas bien y que eso molesta al poder. Iker fue contundente: «Un vídeo desmiente los ataques que he sufrido. Se está juzgando no el caso Jiménez, ni mi libertad, hablamos de la libertad de todos». Una firma, ING Direct, le retiró la publicidad. Después quiso explicar el porqué: «La planificación se hace teniendo en cuenta la actualidad».
¿Actualidad? Horizonte había sido líder con la actualidad de la riada y el día de la eliminación de la publicidad de ING arrasó en audiencia: casi un millón de espectadores y un 13,2 % de share. Seis puntos más que su rival de La Sexta que intentó desacreditarlo la semana anterior. Dos programas de máxima actualidad para incluir publicidad. Como así hicieron ONCE, Mercedes, Hyundai, Jysk, Reale seguros, Lowi, Shein, Wipp Express, Marqués de Carrión, Aliexpress, Ariel, Colgate, Amazon y Lenor.
Ana Rosa Quintana, directora de TardeAR en Telecinco, apoyó a Iker Jiménez y Carmen Porter: «No se puede utilizar una empresa para coartar la libertad de expresión de las personas. Ahora están recibiendo el pago de lo que han hecho. Les ha salido mal. Me alegro mucho de que les retiren todas las cuentas». ING se apresuró a decir que no se iba nadie de su banco.
«Y lo grave no es que hayan ido contra Iker, la empresa que lo contrata y las firmas que se anuncian en su programa — escribe Antonio R. Naranjo en El Debate—, sino que en ese ajuste de cuentas lamentable hayan intentado también convertir en bulo todo aquello que simplemente molesta al asfixiante poder ejercido por Sánchez…».
Otro presentador, Jordi Évole, aprovechó el premio Ondas para hacer «su» política y dijo: «que no nos vuelvan a engañar: Mazón dimisión». Había cumplido su trabajo. Su productora, Producciones del Barrio, ha facturado a RTVE más de 1.200.000 euros en dos años y ahora le han comprado Al cielo con ella, presentado por la cómica Henar Álvarez y con algún colaborador como Alberto Redondo, conocido en las redes como Míster Jägger, que ha generado numerosas críticas por mensajes como este: «¿Estará Marta del Castillo en el videojuego Rapture?». O este otro: «Cuando vea un grupo de niñas escuchando Cigaro o New Faith… las violo».
Antonio del Castillo, padre de Marta, denunció el polémico fichaje de RTVE: «En TVE han metido a semejante individuo que se dedica a hacer chistes macabros». El responsable de su fichaje es Jordi Évole. Por cierto, À Punt, la televisión autonómica valenciana, nunca ha contratado programas con Producciones del Barrio.
Y otro presentador que fue noticia ha sido Joaquín Prat, presentador del programa Vamos a ver que emite Telecinco por las mañanas. Mirando a cámara dijo: «Nosotros la hemos cagado. Les pedimos disculpas porque no hemos sabido estar a la altura». ¿Qué había ocurrido? Pues que Silvia Ruiz, su reportera en la tragedia de Valencia, se detuvo delante de una pared de la localidad de Masanasa en la que estaba escrito: «Pedro HDP». La reportera dijo: «Incluso vemos mensajes de barro como: Pedro, descanse en paz». Joaquín Prat, que no se corta y se moja en temas políticos, pidió perdón porque la pintada solo podía tener una interpretación. Esa.