La venta de libros crece un 25 % en 2021, pero un tercio de España sigue sin leer

Ha sido un gran año. Al menos en cuanto a libros se refiere. Las ventas en librerías van a cerrar el presente año con un crecimiento del 25 % respecto a 2020 y del 20 % respecto a 2019, que fue el año con mejor datos desde el hundimiento del sector en 2013. Sin embargo, tras la crisis financiera comenzada en 2008 el sector editorial ha tenido que hacer frente a otra, la crisis de la pandemia, que mantuvo fábricas y establecimientos cerrados durante meses.

Así lo ha explicado Álvaro Manso, portavoz de la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros (Cegal), y librero de Luz y Vida, en la ciudad de Burgos, en Las mañanas de RNE. Desde Cegal son conscientes de la suerte que tienen dentro del sector de la cultura, que continúa en crisis. «Es sorprendente: ya desde la vuelta del confinamiento tuvimos una reacción en favor de las librerías independientes por parte de los lectores muy grande. Somos unos privilegiados, ya hemos escuchado cómo está el resto del sector. Hemos visto la vocación del público por acercarse a las librerías de su barrio».

Y dentro de todas las lecturas negativas, la pandemia tuvo también una consecuencia positiva: además de crecer el consumo de plataformas de streaming, creció también el consumo cultural, algo que se reflejó en los hábitos de lectura. Otro dato positivo, que pudo extraerse ya de la Feria del Libro de Sharjah, es la incorporación constante de las generaciones más jóvenes a la lectura: la venta de libros infantiles y juveniles se ha visto disparada el último año.

El cómic, un motor de lectura

En un contexto de optimismo por el aumento generalizado por las ventas de libros, el cómic ha encontrado, por fin, su lugar. En especial, el cómic japonés ha irrumpido con fuerza en Occidente, y por primera vez las ventas de manga superan a los cómic estadounidenses (el mítico género de superhéroes). Este fenómeno no se circunscribe a España, sino que recorre toda Europa: surgen sellos editoriales especializados en manga, cada vez hay más obras dedicadas a ello y las cifras estiman que ha experimentado un aumento del 70 % en España.

En las grandes superficies –y también en las pequeñas librerías– se ven cada vez más rincones dedicados al cómic y a la novela gráfica, y las grandes editoriales están incorporando también mayor variedad y diversidad a sus catálogos, incluyendo temáticas diversas: terror, ciencia ficción, aventura, humor surrealista... Paralelamente, este 2021 se han recuperado también grandes clásicos del cómic, como el Flash Gordon de Dan Barry, los EC Cómics, Kraken, La pista atlántica, Livingstone contra Fumake o Drácula.

«Lectura infinita», el plan del Gobierno para fomentar la lectura

«Hay quien piensa que el cómic no es cultura. La ignorancia también es libre». El ministro de Cultura y Deportes, Miquel Iceta, se ha permitido alguna broma en la presentación del Plan de Fomento de la Lectura 2021-2024. Según el socialista, este plan busca dialogar y encontrar soluciones para «todo el mundo», desde los agentes culturales como los gremios de libreros, editores y bibliotecas, hasta los lectores. Sobre el Plan, cuyo lema referencia la #LecturaInfinita, el ministro ha asegurado que no se trata de «un invento hecho desde un despacho, sino que parte del diálogo con sectores del ámbito cultural».

El objetivo va más allá de conseguir incrementar los hábitos de lectura. «Se parte de la idea de que leer es un bien para toda la sociedad, desde distintos ámbitos: la sostenibilidad, la salud mental, el progreso o la construcción de una sociedad crítica», ha continuado Iceta, quien destacaba que la lectura es también «un elemento fundamental desde el punto de vista sociosanitario, económico y educativo y una oportunidad en la incipiente economía digital». De hecho, de cada 100 libros que se venden, siete son electrónicos, 25 son en plataformas digitales y el resto, 68, se adquieren en las librerías.

Por su parte, María José Gálvez, directora general del Libro y Fomento de la Lectura, ha detallado los programas del Plan de Fomento de la Lectura, entre los que destacan las nuevas líneas de animación lectora en el mundo rural, una apuesta por el desarrollo sostenible. Gálvez ha insistido en la «colaboración de todos los agentes sociales» con la que cuenta este plan «diverso, plural e infinito». «Conseguir que la lectura rompa las brechas estructurales y que se convierta en un hábito plenamente incorporado a nuestras vidas» son las principales motivaciones del Plan, asentado en una serie de pilares como la «ampliación del concepto de lectura sin modificar su esencia, descifrando los códigos que el lenguaje nos permite».

Entre otras, las líneas de actuación desde el ministerio están enfocadas a la «formación de mediadores de lectura» (libreros y bibliotecarios), a la «lectura en la primera infancia» (lectura en voz alta), al Día del cómic y a «la participación de embajadores o influencers de la lectura», según ha detallado Gálvez. En cuanto a las acciones concretas que se llevarán a cabo desde el próximo 1 de enero, unas más tradicionales y otras más innovadoras, ha nombrado algunas de las once propuestas: «Leo contigo», «Dime qué lees» y «Lectura sostenible».

Tres de cada diez españoles no leen

El Plan del Gobierno contempla la necesidad de fomentar la lectura en positivo, reconociendo la necesidad de incrementar los índices de lectura en sectores poblacionales donde registra una fuerte caída, por ejemplo, en la adolescencia y la madurez, pero destacando también que España es un país lector. La tendencia en hábitos lectores en España es ascendente desde 2010, hasta llegar en 2021 a un 68,8 % de españoles y españolas que leen. «Sin embargo, queda mucho camino hasta incorporar a ese 30 % de la población española que no lee», recalcaba Gálvez.