Fundado en 1910

El pintor Augusto Ferrer-Dalmau y el académico Arturo Pérez-Reverte, en la inauguración de la Fundación Arte e HistoriaPaula Argüelles

Nace la Fundación Ferrer-Dalmau «para los amantes del arte, la historia y España»

Augusto Ferrer-Dalmau, referente mundial de la pintura histórico-militar, presenta una fundación que pretende promover y difundir la cultura a través de actividades docentes y formativas

Mucho bullicio, muchos uniformes, muchas mascarillas y mucha seguridad en el Real Casino de Madrid. No es para menos. El académico Arturo Pérez-Reverte y el pintor Augusto Ferrer-Dalmau son solo dos de los protagonistas de la noche. En el Salón Real se dan cita desde la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, hasta Pedro de Borbón-Dos Sicilias, pasando por el General de División Antonio Esteban López o el músico y vocalista de la banda Hombres G David Summers

Lo que convoca a tan variados miembros de la sociedad civil y del Ejército es la presentación de la Fundación Arte e Historia Ferrer-Dalmau, una institución con vocación cultural que nace «para promover la investigación y poner en valor los recursos históricos y artísticos de España». Todo comenzó en mayo de 2018, cuando Pérez-Reverte y Ferrer-Dalmau, amigos unidos por el amor a la Historia, se embarcaron en un apasionante viaje a Moscú. «Rusia es culpable. Lo matizo: todo comenzó en Rusia», bromeaba el escritor, uno de los patronos de la fundación, en su discurso de presentación. Hace tres años visitaron el taller Grekov, un lugar que a sus 85 años «sigue siendo impresionante, catedral de la pintura histórica de este viejo y sufrido país. La idea original, y para eso nació el taller, era crear un espacio donde los mejores pintores rusos, soviéticos entonces, pudieran trabajar en obras que representasen momentos importantes; no sólo soldados y batallas, sino también ciudades, puertos, paisajes donde la historia hubiese dejado huella a través de los siglos».

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz AyusoPaula Argüelles

Contaba el académico que a Augusto Ferrer-Dalmau, pintor  consolidado como una de las referencias mundiales de la pintura histórico-militar y el artista más importante en este género en España, se le ocurrió entonces importar la idea y lanzarla en nuestro país. «Si una empresa, un particular o un millonetis cualquiera quiere una obra histórica para su salón, su rotonda o su jardín, se lo encarga al taller Grekov, que depende del Ministerio de Defensa Ruso. Hay artistas prestigiosos rusos que trabajan para satisfacer esa demanda», explica Pérez-Reverte, que le recomendó a su amigo, en cambio, no depender de ninguna institución, sino ser una institución privada, porque «cuando entra la política todo se contamina, se manipula o se interpreta».

Una fundación, pero también una «gran familia de artistas»

Ese fue el germen de la Fundación Arte e Historia Ferrer-Dalmau, que para el pintor barcelonés es «hacer realidad un sueño». Parco en palabras, a pesar de ser el gran protagonista de la inauguración de la institución que lleva su nombre, el también profesor destacó la importancia de conocer y transmitir la Historia: «Pasamos por este mundo y es bonito dejar algo para la posteridad, y esta es mi oportunidad. Tengo una edad buena para poder enseñar a otras personas y aprender yo también de ellos, que me enseñarán cosas que yo no sé». Hace referencia Ferrer-Dalmau al posgrado que se está poniendo en marcha junto a la Universidad de Nebrija, y que verá la luz el próximo septiembre. «La Fundación tiene tres líneas principales de actuación: la creación del máster universitario de Pintura Histórica, único en el mundo; el taller a imagen y semejanza del de Moscú, en el que Ferrer-Dalmau podrá transmitir sus conocimientos, y la difusión cultural a través de la creación artística y de la historia, con el impulso de certámenes, foros, congresos y conciertos», ha explicado Pedro de Borbón-Dos Sicilias, presidente de la fundación.

Este curso de posgrado, aún en fase de estudio y desarrollo, incluirá asignaturas como el estudio y pintura del caballo, paisaje, figuración, escenografía, bagaje e impedimenta, vestuario... El propio Augusto Ferrer-Dalmau, además de supervisor, será profesor de una asignatura en la que explicará cómo plantear un cuadro partiendo de cero, mientras que Arturo Pérez Reverte impartirá la asignatura Naval. Aparte del Máster, la Fundación también tiene previsto proyectar breves cursos de pintura y dibujo para noveles.

«Mi idea es formar una gran familia de artistas que nos ayude a plasmar imágenes del pasado. Para ello hace falta un gran trabajo de investigación: a la hora de pintar es importante entender cómo eran entonces aquellos momentos históricos», continuaba Ferrer-Dalmau. Y es que la asociación de Escritores para la Historia que preside Antonio Henares forma parte del patronato de la fundación, y está previsto que sus miembros den conferencias e impartan clases a los alumnos del máster, ya que «el proceso de investigación para una novela histórica, en cierto modo, es el mismo que puede tener un cuadro».

Augusto Ferrer-Dalmau, Pedro de Borbón-Dos Sicilias y su mujer, Sofía LandalucePaula Argüelles

«Los que van a formar parte de este taller no van a pasarlo bien: va a ser muy duro, van a sufrir, a picar piedra; les vamos a exigir un trabajo duro y exigente y una dedicación exclusiva, de muchas horas. Porque ese es el camino: trabajar duro y aprender», finalizaba Ferrer-Dalmau su intervención.

Por su parte, Pedro de Borbón-Dos Sicilias destacó la importancia de dar a conocer «el inmenso legado artístico e histórico de España». «Las imágenes se fijan rápidamente en nuestra memoria y no se olvidan. Hay mucho escrito sobre España; sin embargo, disponemos de menos imágenes que ilustren los hechos más significativos de nuestra Historia. En esta nueva era de desarrollo tecnológico es importante transmitir hechos de nuestra Historia con rigurosa precisión. Aprender de nuestro pasado es lo que nos permite construir nuestro futuro», destacaba el duque de Calabria, que ha puesto en el centro de su discurso «el común y profundo amor de todos los patronos por el arte, la historia y por España».

Un monumento que hable «de la gloria del imperio español»

Como director ejecutivo de la Fundación Arte e Historia, el General de División Antonio Esteban López se ha encargado de explicar el funcionamiento de la institución, de relatar la relación de patronos (12 en total, entre personas físicas y jurídicas) y de explicar en detalle las distintas obras que ya están en marcha. Además del máster, la fundación tiene como objetivo levantar un monumento a los Tercios, «esos soldados que dieron gloria a España durante los siglos XVI y XVII, siglos de oro para la milicia y para las artes y las letras», explicaba el general, que destacó la unión entre estos sectores, como ya reflejó Cervantes. «El proyecto del conjunto escultórico es incluso previo a la visita a Moscú: nació en 2017».

Los Tercios fueron los primeros cuerpos de infantería de marina de la historia y gracias a ellos los Austrias mantuvieron sus dominios durante siglos. La idea de erigirles un monumento fue recogida por el escultor Salvador Amaya, que le propuso al pintor de batallas Augusto Ferrer-Dalmau que hiciera los bocetos y diseñara la estatua. Ambos llegaron así a un esbozo de grupo escultórico que estaría formado por cuatro figuras de 2,7 metros de altura, un piquero, un arcabucero, un alférez portando la bandera de la compañía y un escudado armado con sable y daga. Según Esteban López, la financiación es enteramente particular, y la Comunidad de Madrid estudia el emplazamiento más adecuado para el monumento. 

Boceto del monumento a Los Tercios, por Augusto Ferrer-Dalmau

Entre los miembros del patronato de la FFD figuran algunos ya mencionados, como Pedro de Borbón-Dos Sicilias y Orleans, los Generales Fernando Alejandre y Antonio Esteban, pero también representantes de grupos empresariales cuyas aportaciones han hecho posible la iniciativa, entre ellas la Universidad de Nebrija, el grupo Torre-Rioja, el Arquimea, Tecnesis 3000, Las Rosas y la Asociación de Escritores con la Historia, con su presidente, Chani Pérez Henares.