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Al Pacino interpretó al judío Shylock en la adaptación al cine de 'El mercader de Venecia" de 2004

Cultura de la cancelación

Un colegio de Nueva York cancela 'El mercader de Venecia' de Shakespeare por ser «antisemita»

Los padres de los alumnos se han quejado de «lo malo y peligroso que puede llegar a ser» lanzar un mensaje de antisemitismo con esta representación teatral

Primero fue la cancelación de Un mundo feliz, de Aldoux Huxley, en la Universidad de Seattle. Después, la Universidad de Northampton declaró que 1984, de George Orwell, era «un libro un libro ofensivo y perturbador». Las escuelas de Tennesse prohibieron el cómic del Holocausto Maus: el relato de un superviviente. Los ejemplos abundan y no van a dejar de crecer: de hecho, en Estados Unidos existen ya «listas de libros prohibidos», que son cancelados por la cultura de lo políticamente correcto especialmente por tratar temas de raza, sexo o diversidad.

El último afectado –y parece que ha tardado– ha sido William Shakespeare. A finales del siglo XVI, el mayor escritor de todos los tiempos publicó El mercader de Venecia, una de sus obras capitales, cuya trama gira en torno a la historia de Bassiano, un noble veneciano que pide dinero a su amigo y mercader Antonio para poder seguir con su noviazgo con la rica heredera Porcia. Sin embargo Antonio, al encontrarse en un momento sin apenas dinero, le propone que se lo preste Shylock, un usurero judío que le prestará la suma con una condición: si no le paga el día fijado, tendrá derecho a tomarse una libra de carne del cuerpo de Antonio.

A pesar de su extrema calidad literaria, el colegio 75 Morton de Manhattan, en Nueva York, ha decidido cancelar la representación teatral que iban a realizar en séptimo curso, que equivaldría a nuestro 1º de ESO. Han sido los padres quienes se han quejado de «los mensajes antisemitas» que aparecen en la obra. Los padres de los alumnos están preocupados por «la forma en que se muestra el antisemitismo en esta obra: si no tienes un mínimo de conocimiento y contexto, no puedes entender lo malo y peligroso que puede llegar a ser», según recoge The New York Post.