Fundado en 1910

Manifestantes contra las restricciones y contra las vacunas se instalan frente al Parlamento neozelandés, en WellingtonAFP

La 'Macarena' como arma disuasoria contra las protestas antivacunas en Nueva Zelanda

Para intentar disolver el campamento de manifestantes que se instaló frente al Parlamento el martes, reproducen música en bucles de 15 minutos y a todo volumen

Las autoridades de Nueva Zelanda han encontrado en la mítica canción de Los del Río, Macarena, y en los éxitos de Barry Manilow un arma disuasorio para desarmar las manifestaciones antivacunas. Este domingo, miles de personas se han manifestado frente al edificio del Parlamento, en Wellington, para protestar contra las vacunas y las fuertes restricciones impuestas.

Para apagar su poder de convocatoria y, sobre todo, para intentar tapar las proclamas de sus megáfonos, las autoridades han decidido reproducir en bucles de 15 minutos y a todo trapo canciones como la 'Macarena', grandes éxitos de Barry Manilow o la repetitiva canción infantil Baby Shark.

Las protestas comenzaron el martes pasado cuando un convoy de vehículos se dirigió al parlamento. Inspirados por las grandes manifestaciones contra la obligación de recibir las vacunas covid en Canadá, cientos de manifestantes llegaron a la capital neozelandesa, Wellington, para manifestarse contra las restricciones de Covid.

Manifestantes rodean el Parlamento de Nueva Zelanda mientras un cordón policial vigila el perímetroAFP

Adoptaron el nombre de «Convoy por la Libertad» y bloquearon calles de la ciudad. Aunque el pasado miércoles el número de participantes en esta manifestación se redujo considerablemente, volvió a crecer durante el fin de semana. El pasado jueves, la policía arrestó a 122 manifestantes y acusó a otras muchas de allanamiento de morada y de obstrucción a la autoridad.

En vídeos difundidos en redes sociales se puede ver al grupo de manifestantes llevando a cabo una tradicional 'Haka' contra el Gobierno neozelandés. Una 'Haka' es un baile propio de la cultura maorí de Nueva Zelanda, en la que se combinan cantos, movimientos, voces y gestos vigorosos sincronizados

Las tácticas utilizadas por las autoridades para tratar de disolver la concentración consistieron en encender el riego automático en el césped donde estaban acampados el viernes. Pero los manifestantes tomaron represalias cavando trincheras y construyendo tuberías de desagüe improvisadas para desviar el agua.

Patos de mentira instalados en uno de los desagües en el campamento de manifestantes instalado frente al Parlamento neozelandés, en WellingtonAFP

Al percatarse de que la medida no resultó efectiva, el presidente del Parlamento, Trevor Mallard, buscó una nueva medida disuasoria: poner canciones que pueden resultar repetitivas a todo volumen.

James Blunt se ofrece voluntario

La medida ha provocado numerosas reacciones en las redes sociales, incluida la del cantante británico James Blunt que se ofreció a cantar en directo frente a los manifestantes si la 'Macarena' y Barry Manilow no surtían efecto.

Al parecer, alguien del Gobierno neozelandés leyó el tuit e incluyó este domingo la canción You're Beautiful en la lista de reproducción este domingo.

Nueva Zelanda ha impuesto estrictas restricciones para contener el virus durante casi dos años. Los bloqueos y el cierre de fronteras internacionales han ayudado a mantener muy bajas las cifras de infecciones y muertes. Pero en contraposición, los ciudadanos siguen teniendo que lidiar con medidas férreas que limitan sus movimientos debido, en gran parte, al coste que supone cumplir con las restricciones de viaje fuera del país, por ejemplo.

La prolongación en el tiempo de muchas de esas restricciones, incluido un aislamiento mínimo de 10 días y un mandato de vacunación, ha alimentado un resentimiento creciente en la comunidad. Las encuestas públicas han mostrado una creciente insatisfacción con el gobierno de Jacinda Ardern, y ha habido un aumento en la actividad de protesta en los últimos meses.