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Escena de 'Lightyear'Disney

Un beso lésbico prohíbe el estreno de 'Lightyear', la última película de 'Toy Story', en los Emiratos

La Oficina de Regulación de Medios del Ministerio de Cultura y Juventud del país anunció que la película no se proyectará porque «viola los estándares de contenido mediático vigentes»

Dos personajes femeninos, dos lesbianas, se besan en la última película de Pixar, Lightyear. Los Emiratos Árabes Unidos criminalizan las relaciones entre personas del mismo sexo, como muchos países de mayoría musulmana. Malasia también se plantea prohibir el filme, algo que podría extender el veto al gran estreno de la factoría de animación, del que se prevé que recaude más de 100 millones de dólares en su primer fin de semana.

«Violación de los estándares»

La Oficina Reguladora de Medios del Ministerio de Juventud y Cultura emiratí emitió un comunicado en Twitter donde informaba de que la película «no tiene licencia para su proyección pública debido a su violación de los estándares de contenido de medios». La misma oficina que confirma que «todas las películas proyectadas están sujetas a seguimiento y evaluación antes de la fecha de proyección al público, para garantizar la seguridad del contenido circulado de acuerdo con la clasificación de edad apropiada».

El actor Chris Evans, voz del personaje principal, en el estreno de 'Lightyear' en LondresGTRES

Los cines en los Emiratos Árabes ya habían anunciado horarios para la película. Pero una campaña en las redes sociales con el hashtag árabe «Ban Showing Lightyear in the Emirates» («Prohibir Lightyear en los Emiratos»), puso en alerta a los emiratíes conservadores.

Escena eliminada en principio

La escena había sido eliminada en principio, pero luego volvió a ser incluida tras las protestas de los trabajadores de Pixar en una carta que afirmaba que "En Pixar hemos presenciado personalmente bellas historias, llenas de personajes diversos, ser devueltas con recortes y convertidas en cascotes tras la revisión de las filas corporativas de Disney”.

Disney, a la que pertenece Pixar, ya había permitido en el pasado que se censurasen sus películas en el mercado de Oriente Medio, por lo que había recibido protestas de activistas y de su propio personal. Una permisividad que contrasta con (y contradice) el mensaje categórico que aparece antes del visionado de algunas películas clásicas de su catálogo por streaming en Europa:

«Este contenido incluye representaciones negativas o contenido inapropiado de personas o culturas. Estos estereotipos eran incorrectos entonces y lo son ahora. En lugar de eliminar este contenido, queremos reconocer su impacto nocivo, aprender y fomentar que se hable sobre él para crear entre todos un futuro más inclusivo. Disney se compromete a crear historias con temas inspiradores y motivadores que reflejen la gran diversidad de la experiencia humana en todo el mundo».