La iglesia de La Coruña defiende la restauración de la Virgen de Brocos: «Sólo fue un pequeño retoque»
Tras la denuncia y la investigación de la Xunta, la iglesia castrense de San Andrés se defiende asegurando que la restauración la hizo un experto en patrimonio
Tras la polémica surgida al descubrirse un posible caso parecido al del famoso Ecce Homo de Borja, con la restauración de la Virgen de Brocos localizada en la iglesia castrense de San Andrés, los responsables han salido en defensa de este «pequeño cambio» que ha enfadado a vecinos y defensores del patrimonio por igual.
La imagen de la Virgen pasó varios meses fuera del templo para ser «restaurada» y sufrir una pequeña trasformación; sin embargo, a su vuelta, la figura de la Virgen había cambiado completamente y era prácticamente irreconocible.
Este suceso llegó a los oídos del arquitecto Alberto Fuentes Valcárcel, que trasladó la noticia a la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Xunta de Galicia. Los hizo conocedores a través de un informe en el que alertaba sobre «un posible nuevo caso de Ecce Homo, aunque no tan grave, por el repintado de una virgen del siglo XIX realizada por Isidoro Brocos.
El arquitecto que estaba estudiando la obra de Brocos quedó horrorizado al enterarse de que la obra original había perdido por completo la policromía original y de que la obra, más que una restauración, había sufrido un completo repintado.
«Un trabajo de limpieza»
A pesar de estas acusaciones, los responsables de la iglesia aseguran que solo fue un trabajo de limpieza, porque su estado de conservación no era totalmente bueno. Ante las acusaciones sobre el cambio total del color de la figura, han respondido que sólo «se ha hecho un pequeño retoque» en la Virgen del Carmen.
Además, insisten en que las obras de restauración no han finalizado y que todavía no se puede hacer una valoración final: la misma corona se encuentra todavía en Madrid «para su restauración».
Los responsables no han querido revelar el nombre del restaurador, pero afirman que el responsable está versado en este tipo de arreglos de patrimonio. Asimismo, defienden al capellán responsable de encargar los trabajos de restauración.
«En ningún momento se ha intentado modificar la imagen y faltar a su originalidad», han aseverado desde la parroquia. A los feligreses que han rechazado la nueva imagen de la Virgen les replican con que las valoraciones de la gente son totalmente subjetivas y que «para gustos, colores».
Los responsables de la iglesia ya han mantenido conversaciones con la Xunta y han dicho que, si hay algo que rectificar, se hará sin problemas. La estatuilla ya fue retirada el pasado jueves, aunque no por el revuelo desatado, afirman los administradores, si no por las labores de restauración.