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Retrato del escritor catalán Terenci MoixIlustración de Albert Pons

Posguerra, cine y vanguardia en 'El peso de la paja', las memorias por el 20 aniversario de la muerte de Terenci Moix

El escritor catalán comenzó en la vanguardia de las letras catalanas y acabó enamorado de los movimientos masivos y la subcultura kitsch. Su biografía recoge desde sus primeros días en la Barcelona de la posguerra hasta sus viajes por el mundo durante los años 60

Aunque Terenci Moix nació en Barcelona, a él le gustaba decir que lo había hecho en Alejandría. Autor de novelas y libros de viajes, fue un escritor que empezó en los movimientos más adelantados de las letras catalanas de los años 60. Uno de sus primeros encuentros exitosos con la cultura tuvo lugar cuando le concedieron el premio Josep Pla por Onades sobre una roca deserta en 1968, a la edad de 26 años. Además de escritor, fue cinéfilo hasta la médula: el cine compuso gran parte de los recuerdos de su vida.

Se cumplen 20 años de la muerte de este singular escritor que pasó de escribir en catalán en las vanguardias catalanas a las novelas para las masas en castellano. Y para conmemorar este aniversario, la editorial Tusquets se ha encargado de reeditar, en un solo libro, los tres volúmenes de sus memorias, cuyo título será El peso de la paja, nombre que tenía la plaza del famoso barrio del Raval donde creció el escritor.

En este lugar trascurre buena parte de sus memorias, donde refleja un vívido recuerdo de aquella Barcelona en reconstrucción tras la Guerra Civil. Una sociedad en la que primaba el estatus social, ante todo, con una cultura popular dominada por el cómic, el teatro y el cine de Hollywood, gracias a los cuales el extraordinario cronista conseguía escapar de una gris Barcelona sometida al trauma de la posguerra.

'El peso de la paja'

Es el cine el auténtico protagonista de estas memorias: se puede intuir por los títulos de las tres partes en las que se divide el libro (El cine de los sábados, El beso de Peter Pan y Extraño en el paraíso). El séptimo arte es el centro de la vida de Moix: su madre rompió aguas en un cine y allí tuvo su primera relación amorosa. Acudía a las salas casi todos los días, de forma gratuita, gracias al acuerdo que tenían sus padres con las distribuidoras: ellos ponían sus anuncios en su granja y las distribuidoras les permitían acudir a ver películas sin coste alguno.

Tusquets reedita, en un solo libro, los tres volúmenes de las memorias de Terenci Moix en 'El peso de la paja'

Durante su adolescencia transformó el cine en su refugio, alejándose del caótico ambiente familiar en el que su padre se dedicaba a contratar servicios de mujeres prostituidas mientras su madre le era infiel. Su vida se sostenía gracias a las revistas de cine estadounidenses y españolas como Fotogramas. Siempre tuvo el deseo de que le gustase la alta cultura; sin embargo, lo que más le atraía era lo masivo, como el género péplum –le encantaba el cinede romanos y el relacionado con el Antiguo Egipto– y se perdía entre lo kitsch.

Icono pop

El recorrido de las memorias de Moix no llega a su época de madurez, que fue un periodo de enorme éxito tanto en su literatura como en su carrera como entrevistador. Se convirtió en un icono pop muy relacionado con la cultura de izquierdas de la capital condal.

Esta memoria es una aproximación a la vida del escritor y, por ende, a su amor incondicional por el cine. Además, es un relato de la España y la Cataluña de esos tiempos, un lugar donde la cultura popular y el bienestar del consumo que llegaba desde Estados Unidos se abría paso entre las fronteras españolas.