Fundado en 1910

'Hipómenes y Atlanta', de Guido Reni, 1618 – 1619Museo del Prado

El Museo del Prado, de vuelta al barroco, inaugura su gran exposición dedicada a Guido Reni

Se centra en su aportación al barroco y su relación con otros pintores como Murillo o Caravaggio mientras que desvela aspectos desconocidos –pero igual de importantes– de su vida

El artista Guido Reni (Bolonia, 1575 – Bolonia, 1642), gozará a partir del 28 de marzo –hasta el 9 de julio– de su propia exposición monográfica en el Museo del Prado, patrocinada exclusivamente por la Fundación BBVA y en colaboración con más de cuarenta instituciones con las que se han conseguido reunir casi cien obras originales.

El tema central de la muestra es dar a conocer su importante contribución a la configuración de la estética barroca, un barroco que consiguió influir en pintores como Murillo –enlazándolo así con su influencia en España– o Caravaggio. El propio comisario de la exposición, David García Cueto, afirmó que Reni fue «un artista cuya fama tuvo una enorme difusión», una figura que se vio atacada durante el siglo XIX por «prejuicios decimonónicos en torno al concepto de artista».

Algunas de las obras más anticipadas de Reni son: el imponente Triunfo de Job, procedente de la catedral de Nôtre-Dame de París, la Inmaculada Concepción del Metropolitan Museum of Art de Nueva York –que se confronta con la Inmaculada de Murillo, en la que se aprecia la inspiración en el italiano–; Cleopatra de The Royal Collection de Londres, Dibujo y color del Musée du Louvre de París; y Salomé con la cabeza de San Juan Bautista y Magdalena penitente de las las Gallerie Nazionale d’Arte Antica di Roma (Palacios Barberini y Corsini).

Además, a estas se deben añadir las propias del Museo del Prado como Hipómenes y Atalanta –que se expondrán dos versiones, una proveniente del Museo di Capodimonte, Nápoles, la cual ha sido restaurada para la ocasión–, San Sebastián, Muchacha con una rosa o Virgen de la silla, aparte de las contribuciones artísticas de otros pintores como Murillo o Caravaggio –con quien Reni rivalizó en su viaje a Roma hasta llegar a la enemistad– con su David Derrotando a Goliat –que se enfrentará a la versión de Reni, David con la cabeza de Goliat.

Una primavera barroca

García Cueto anima a los visitantes a sacar sus propias conclusiones sobre la figura del artista, dado que en la muestra se hace hincapié a determinados aspectos de su carrera que se suelen pasar por alto, por ejemplo, la causa de su trazo más rápido y simple, y el cambio deliberado en su paleta cromática al final de su vida.

La exposición da comienzo al gran ciclo barroco que el Museo del Prado dedicará toda la primavera y que se verá completado con las jornadas de conferencias dedicadas al artista el 15 y 16 de junio.