Versalles abre los apartamentos privados de María Antonieta por los 400 años del palacio
La reina consorte de Luis XVI llegó a la Corte francesa en 1770 y fue guillotinada durante la Revolución Francesa en 1793
La archiduquesa austríaca María Antonia Josefa Juana de Habsburgo-Lorena, más conocida como María Antonieta, llegó a Versalles en 1770 para casarse con el delfín de Francia Luis XVI y, una vez convertida en reina consorte, ordenó reformar sus habitaciones privadas dentro del palacio. Estas estancias son las que se abren ahora al público con motivo del 400º aniversario de la residencia real cercana a París.
Restaurados para mostrar su auténtico lujo, los apartamentos ocupaban dos pisos del ala izquierda del palacio. Además de estar rodeado en ellos de sus hijos y cortesanas, se sabe por su correspondencia que también alojó allí a su amante, el conde Fersen.
La restauración (tejidos en seda, papel pintado, la biblioteca o la sala de billar) «proporciona una nueva comprensión de la historia con esa paradoja entre vida pública y vida privada, etiqueta e intimidad, un condensado de historia extraordinaria en apenas unos metros cuadrados», explicó Catherine Pégard, presidenta del palacio y del complejo de Versalles. Después de sus obligaciones de etiqueta y ceremonia diarias, María Antonieta se retiraba a sus aposentos a través de una puerta falsa. La misma puerta por la que escapó de los revolucionarios el 6 de octubre de 1789 rumbo París para no volver nunca más a Versalles.