Astérix y Obélix contra la sensiblería: 'El lirio blanco' ataca el buenismo y la autoayuda
El pensamiento positivo es parodiado en El lirio blanco, la nueva entrega de los cómics de los personajes del pequeño pueblo galo resistente a los romanos
La nueva entrega de las historias de Astérix y Obélix viene cargada de «guerra». Y es que Viciovirtus, gurú de la serenidad y ser de luz, irrumpe en la aldea de los míticos personajes para sembrar la concordia mediante la decisión de querer implantar una nueva corriente de pensamiento positivo en el poblado, algo poco común en la aldea. Esta historieta pertenece a El lirio blanco, el nuevo libro de los guerreros galos que ya cuenta con 40 aventuras publicadas en cómic.
En esta nueva entrega, ya a la venta en más de 20 idiomas, la presencia de este personaje perturbará al poblado, ya que, mediante aforismos, empieza a transmitir una corriente de pensamientos positivos y de autoayuda que hace que la vida de los personajes principales comience a cambiar, como una ruptura drástica entre dos personajes.
Francia, inspiración para crear a Viciovirtus
El cómic ha sido presentado esta semana en Barcelona por el guionista Fabrice Caro, quien hace su debut con esta obra. Caro estuvo acompañado por el ilustrador Didier Conrad y ambos han hablado sobre el contraste de esta nueva aventura, que esta vez está alejada del caos y se crean vínculos con personajes. Conrad ha comentado que se inspiró en dos personas muy conocidas en Francia para diseñar a Viciovirtus: Dominique de Villepin y Bernard-Henri Lévy.
Los aforismos del personaje son frases que contienen sabiduría con los que pretende hacer que el pueblo cambie de parecer, aunque no todos se dejan, por lo que Astérix debe luchar para recuperar el equilibrio que había en su aldea. Para ello, decide ir en contra de esa corriente de pensamiento positivo y de autoayuda que parodia la sociedad actual, especialmente la francesa.
Una historia que refleja la actualidad
De igual manera, Caro aseguró que la historia ha sido creada «gracias al auge de libros de autoayuda» con el fin de proponer ideas alejadas de la filosofía que habitaba en la aldea gala. Esto provoca que se dé protagonismo y relevancia a personajes secundarios que hasta el momento no lo tenían.
Por otro lado, Caro afirmó que «estamos en una época donde hay que tener cuidado con todo lo que se hace y soy de los que piensan que deberíamos poder reír de todo porque reímos juntos y no contra alguien. y eso es algo muy propio del universo de Goscinny». A su vez, la editora María José Guitián ha asegurado que la historia aporta su «perspectiva y su visión de los personajes», aparte de reflejar el mundo actual.
Conrad afirmó también que en su país los personajes de Astérix y Obélix son «patrimonio nacional» y tienen un fuerte impacto en la sociedad debido a que son libros «intergeneracionales» y no lo de ciertas épocas: son libros que leen tantos jóvenes como adultos.