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Espido Freire, Emilio Lara, María Dueñas, Luz Gabás, Susana Fortes, Leandro Pérez, Karina Sainz Borgo, José María Merino, Juan Manuel Prada, Julián Martínez-Simancas y Arturo Pérez-Reverte, en la presentación de 'Las luces de la memoria'Europa Press

«Europa no puede entenderse sin España»

Catorce relatos sobre momentos de la historia de España que han sido fundamentales para Europa, y que van desde la época visigoda o la Edad Media hasta nuestros días, pasando por visiones diferentes sobre el emperador Carlos V. Andrés Trapiello y Arturo Pérez-Reverte comparten páginas con Espido Freire o Luz Gabás

El proyecto Zenda presenta, con la colaboración de Iberdrola, su séptimo volumen colectivo de relatos. Si en otras ocasioneslla temática había versado sobre el confinamiento, heroínas o el Camino de Santiago, ahora les ha llegado el turno a relatos sobre la historia de España que afectan de lleno al devenir de Europa. Reunidos bajo el título Las luces de la memoria, este nuevo libro –que se puede descargar de manera gratuita desde la web de Zenda– se compone de catorce capítulos compuestos por sendos autores: desde María Dueñas o Espido Freire hasta Arturo Pérez-Reverte, Juan Manuel de Prada, Karina Sainz Borgo, Lorenzo Silva o Andrés Trapiello.

La práctica totalidad de los autores han participado en el acto de presentación, que se ha desarrollado en una de las naves de la Real Fábrica de Tapices, y al que han asistido personajes tan diversos como Chema Alonso –el experto en ciberseguridad que es miembro del Comité Ejecutivo de Telefónica–, la presentadora de televisión Marta Martínez Nebot (conocida como Marta Flich), o Alfonso Guerra –«padrino y coordinador» del anterior volumen, en palabras de Pérez-Reverte–.

Tras una breve intervención de bienvenida a cargo del creador de Alatriste –que ha insistido en definir Zenda como punto de encuentro de escritores–, y de Julián Martínez-Simancas (adjunto al presidente de Iberdrola), se ha iniciado un turno en que los autores, de manera sucinta y bajo la batuta de Leandro Pérez –uno de los coordinadores de este volumen–, han ido comentando sus respectivos relatos. Según Espido Freire, su historia traslada cómo la Isla de los Faisanes, en el Bidasoa, ha sido el punto en que Francia y España han intercambiado infantas y princesas para compromisos de bodas regias entre ambos países, de modo que «las relaciones personales se transforman en relaciones diplomáticas». Freire admite que se siente «muy cómoda» allí donde «el límite se desdibuja».

Emilio Lara, con su acento de Jaén, dedica su relato al obispo Osio de Córdoba, personaje fundamental en el Concilio de Nicea, en la derrota de Arrio y en la corte del emperador Constantino. Según Lara, «Europa no puede entenderse sin España», sobre todo gracias al desarrollo hispano del «poder blando», basado en la cultura, a partir del siglo XVII.

Espido Freire, Emilio Lara, María Dueñas, Luz Gabás, Susana Fortes, Leandro Pérez, Karina Sainz Borgo, José María Merino, Juan Manuel Prada, Julián Martínez-Simancas y Arturo Pérez-Reverte, en la presentación de 'Las luces de la memoria'Europa Press

De la inmigración española a la guerra contra Napoleón

El cuento de María Dueñas se sitúa en los años 60 del siglo pasado, y aborda la inmigración desde la perspectiva de aquellos españoles que marcharon a Europa, y de cómo ahora algunos de ellos reciben a quienes llegan desde el otro lado del Atlántico. La trama ideada por Luz Gabás se ubica en el Alto Aragón –el Benasque donde ella reside– durante la guerra contra el ejército de Napoleón, y constituye una historia de amor «triste» con un guerrillero como protagonista.

Operación Quick Silver es el título que Susana Fortes escoge para su ficción, ambientada en el espionaje de la II Guerra Mundial –en concreto, los prolegómenos del Desembarco en Normandía– y en la que unas españolas republicanas están involucradas. Por motivos diversos, la basílica de San Isidoro en León hermana los relatos medievales de José María Merino –que reivindica León como auténtica cuna del parlamentarismo– y de Juan Eslava Galán.

Arturo Pérez-Reverte recrea, a su modo –con cómicos anacronismos y lenguaje coloquial–, una carta de Francisco I –el rey francés derrotado en Pavía y llevado preso a Madrid– dirigida a su amante Mimí la Garce. En un momento, Pérez-Reverte pone en la pluma del monarca galo estas líneas: «La torre esta de Los Lujanes no es mal sitio: un poco oscura y húmeda, pero a veces me dejan salir a cenar a Casa Lucio, con escolta, o ir a un tablao flamenco, y mientras zampo y le doy al morapio, me consuelo pensando que peor están ahora mis nobles caballeros».

A continuación, Juan Manuel de Prada opta por situarse en la misma época. Comenta De Prada que los editores le sugirieron Trento como tema, a lo que este novelista señala que Pérez-Reverte y él sostienen «opiniones enfrentadas» sobre la cuestión. De modo que su relato, que se desarrolla en el retiro de Carlos V en Yuste, expone «lo que supuso la protesta de Lutero, la ruptura religiosa y el fin del sueño» de aquel Emperador nacido en Flandes. En Yuste, el rey emérito conversa con el ayo de Juan, su hijo bastardo, y desmenuza las estrepitosas consecuencias que acarreará el credo luterano en «la filosofía, la política, el arte».

Karina Sainz Borgo se ríe de la Leyenda Negra, gracias a un «holandés errante» muy concienciado con el cambio climático. Señala que, tras ser educada en la leyenda de España como «metrópoli opresora», y el Imperio como «vejación», fue cambiando su percepción al afincarse en Madrid, y afirma que «España no solamente fue el Imperio más grande, sino el más permeable». Sin embargo, tanto en Países Bajos como obras de la literatura italiana –El gatopardo, de Lampedusa; Los novios, de Manzoni– se localizan referencias que, de un modo o de otro, alimentan la Leyenda Negra como un factor de construcción del propio relato nacional.

Ante ello, esta nueva edición de Zenda se cierra con un cuento de Andrés Trapiello en el cual un extremeño llamado Hernán conoce a un tal Miguel en una batalla naval que nos suena de algo. Conforme se avanza en la lectura, los datos de Miguel nos recuerdan cada vez más al autor de El Quijote. A ambos personajes los aguarda la esperanza.