¿Conocías estas palabras? Insultos de los de antes
La creación de insultos no ha parado desde que tenemos lenguaje. Unos se han perdido, pero otros se conservan
El lenguaje es el elemento constitutivo de cualquier cultura. Nos permite articular, transmitir y acumular información aprendida como ninguna otra especie.
El español, particularmente, es uno de los idiomas más hablados del mundo y, además, con distintas manifestaciones. Desde Europa hasta Sudamérica y África, esta diversidad hace que exista un vocabulario muy amplio y distinto. Por ello, casi nunca nos quedamos sin palabras para decir algo.
Además, muchas palabras han perdurado desde que se concibieron, incluso aquellas que usamos para cosas no tan buenas, como para insultar. Desde siempre el hombre halla maneras de crear nuevos insultos y además mantenerlos a lo largo de los siglos.
Estos son algunos de los insultos más antiguos del español:
- Fantoche. Aparece en la RAE como masculino despectivo y lo define como «persona grotesca y desdeñable.»
- Casquivano. Esta palabra se usa para aquellas personas que tienen relaciones poco estables. «Dicho de una persona que suele coquetear o establecer relaciones amorosas ocasionales o pasajeras». Esta palabra, además, cuenta con otra acepción que es «poco reflexivo, banal, voluble» Una claramente deriva de otra.
- Petimetre. Dicho de una «persona que se preocupa mucho de su compostura y de seguir las modas».
- Lechuguino. Se define como «persona joven, muy interesada en su aspecto físico, que sigue rigurosamente la moda» Algunos sinónimos que ofrece la Rae para esta palabra son: «presumido», «dandi», «pisaverde» y «figurín»
- Bellaco. Tiene distintas acepciones y ninguna es particularmente buena. «Malo, pícaro, ruin» y «Astuto y sagaz» El Diccionario añade algunos antónimos como: «honrado» y «noble».
- Tragavirotes. «Hombre serio y erguido de demasía»
- Mamacallos. Uno que no necesita aclaratoria es este, definido como «persona tonta y pusilánime»
- Badulaque. Aunque esta palabra muchos la asocian directamente con la tienda de Abu en Los Simpson, tiene un origen muy alejado. La RAE lo define como «persona necia e inconsistente».
- Cornicantano. Y por último, uno de nadie más que Quevedo, un maestro de la invención de palabras, incluyendo insultos. Aparece en Carta de un cornudo a otro, y como se puede intuir su significado guarda relación con «misacantano» que significa «sacerdote que dice o canta su primera misa». Así, «cornicantano» se refiere al marido al que su mujer le pone los cuernos por primera vez.