Enrique Ponce anuncia el cartel de su despedida en Valencia y hace un breve repaso de su carrera

«Echas la vista atrás y lo veo como un sueño. El artífice de todo fue mi abuelo, por el que aprendí el amor al toreo y el respeto al toro. Luego, ha sido una cadena sumando eslabones y siempre viviendo en torero. Aunque me vaya, el torero que hay en mí no se irá nunca», así se expresó el maestro Enrique Ponce en el Centro Cultural La Beneficencia, donde hizo oficial el cartel de su despedida.

Última tarde en Valencia

«Rafael García Garrido contactó conmigo para Fallas, pero en mi cabeza no estaba ni siquiera el volver a torear. Sin embargo, la tarde del 9 de octubre va a ser mi última tarde como torero y quería que fuera en Valencia». Se hacen realidad los rumores del adiós del torero de Chiva en su tierra, después de la Feria de Otoño, el Día de la Comunidad Valenciana.

Preguntado por un día clave en su carrera, dijo que esa era una elección imposible: «No puedo quedarme con un día. Un día te lleva a otro y la carrera de un torero tiene que tener muchos días claves. Por poner uno de ellos en el arranque fue la tarde que me quede aquí, en Valencia, en solitario con los seis toros (...) Pero con un día no vamos a ningún lado. Lo importante es la sucesión de días claves. Hay que triunfar sí o sí en muchos sitios y en mi carrera ha pasado eso. Una cadena sucesiva de tantos años. Hay que estar tocado por la varita mágica de Dios. Por eso estoy agradecido a Dios».

Con Talavante y Romero

«Me despido en un día muy valenciano. Voy a torear pocas corridas, pero muy especiales. No podemos hacer algo en todas las plazas donde he triunfado. Serán pocas en Francia y en España, pero todas con significado y no tenía duda de que tenía que esperar al 9 de octubre en Valencia». Toros de Garcigrande y Juan Pedro Domecq, para Enrique Ponce, Alejandro Talavante y el novillero local, de Algemesí, Nek Romero, que tomará la alternativa.