El 'club de la zeja' contra Milei: de Fito Páez a Leonardo Sbaraglia o Cecilia Roth

Antes de las elecciones, presidentes, exmandatarios y referentes intelectuales se posicionaron públicamente contra él. Tachado de «ultraderechista», las propuestas de Javier Milei prometían poner coto a diversos excesos. Y entre sus medidas también había tiempo, espacio y muchas palabras para aquellos que viven de las subvenciones, especialmente en el mundo de la cultura.

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez; el mandatario brasileño, Luiz Inacio Lula Da Silva, y el exgobernante uruguayo José Mujica, de ideología izquierdista, apoyaron a Massa, de Unión por la Patria. En tanto, exgobernantes derechistas como el mexicano Felipe Calderón (2006-2012) y el colombiano Iván Duque (2018-2022), así como el Premio Nobel de Literatura peruano Mario Vargas Llosa, respaldaron a Milei, de La Libertad Avanza.

El economista, político y profesor ganó las elecciones y se convirtió en presidente de la Nación Argentina el 10 de diciembre de 2023. Desde entonces, la cultura no ha estado entre las prioridades del libertario; antes al contrario, se ha propuesto eliminar el ministerio, entre otras medidas para conseguir «plata» en un país «al borde de la hiperinflación».

El nuevo secretario de Cultura, Leonardo Cifelli, piensa acometer el cierre de varias instituciones culturales del país, a pesar de que este sector supone el 6 % del PIB nacional. Artistas, actores y diversos trabajadores del sector convocaron una manifestación de repudio ante el Congreso a la que acudieron 2.000 personas y varios museos nacionales acogieron protestas y huelgas parciales.

20.000 firmas en contra

Charly García, Fito Páez, León Gieco, Cecilia Roth, Claudia Piñeiro, Adolfo Aristaráin y Leonardo Sbaraglia son algunas de las más de 20.000 figuras de Argentina que firmaron una carta titulada 'La cultura está en peligro' en rechazo a las reformas en el sector cultural en Argentina del presidente Milei.

La misiva, dirigida al Congreso argentino, increpa a los diputados y senadores que debaten estos días la 'ley ómnibus' propuesta por Milei, que defiende la desregulación de la economía, la reducción del sector público y lograr un equilibrio fiscal. «El Gobierno Nacional pretende, a través de la 'ley ómnibus', derogar leyes vitales para la supervivencia de las industrias culturales, las artes y las ciencias, y el patrimonio cultural de nuestro país», puede leerse en un fragmento del texto.

«La Cultura es identidad. La Cultura es lo único que no se puede importar. La hacen los pueblos. Queremos seguir teniendo una identidad propia como Nación. De otro modo sólo nos quedará el destino triste de 'no ser'. De eso se trata esta lucha. Un país es tan grande o tan pequeño como la medida de su proyecto cultural», resalta la carta, que es introducida por un texto explicatorio de la «mirada mercantilista» del nuevo Gobierno.

A continuación, piden una serie de medidas para que los diputados y senadores estén «a la altura de la Historia», como que no se desfinancie el INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales), que no se cierre el Fondo Nacional de las Artes ni el Instituto Nacional del Teatro o que se mantengan las subvenciones a organismos como el Instituto Nacional de la Música. «Sí a la soberanía cultural. Sí a la democracia», termina la carta.

Sin embargo, y a pesar de las 20.000 firmas, la carta no ha tenido buena acogida entre la sociedad. «Donde hay un kirchnerista pataleando hay un curro que se termina», escribe un usuario. «La cultura no es el INCAA, la cultura no es de los actores, la cultura no necesita financiamiento… Siempre perdiendo el tiempo es discusiones absurdas y encima nocivas para la sociedad entera», contesta otro. «La cultura no se subvenciona. No son artistas, quieren ser empleados del Estado. Vayan a Cuba si quieren todo del Estado», añade uno más.

Hace poco más de una semana, Adolfo Aristaráin, el director de Martín (Hache) y Roma, escribió una columna en el periódico Página 12 en el que prometía manifestarse hasta echar a Milei. «No hay que darles tiempo. Hay que ganar la calle: hasta que caiga el Gobierno», apuntaba en el medio peronista, convirtiéndose en el portavoz de la oposición del mundo de la cultura a Milei. «Gracias a un grupo lamentablemente numeroso de imbéciles, ignorantes y zombies que una vez votó a Macri, y ahora a su bufón Milei y a toda la banda de rufianes que los acompañan», añadía, provocando un tsunami informativo que llevó al fiscal Carlos Stornelli a denunciarlo por «incitar a la violencia colectiva contra las instituciones en detrimento del normal desempeño de un Gobierno democráticamente elegido».

Si bien Milei enfrenta oposición a nivel político en el Congreso; oposición a nivel judicial por la más de una decena de denuncias y recursos de amparo; y oposición a nivel social con una huelga general convocada para el próximo 24 de enero próximo, está negociando con un ala de la oposición ciertas modificaciones en la ´ley ómnibus´, que incluyen el tramo cultural, para obtener dictamen en las comisiones antes del paro general.