¿Cómo se dice, 'echar la siesta' o 'hacer la siesta'?
«Echarse/dormir la siesta» son las expresiones más normales en español; el uso de «hacer» es influencia del catalán
La palabra 'siesta' procede del latín 'sextam oram' e indica la sexta hora, que correspondía exactamente con el mediodía, ya que los días se dividían desde la salida del sol hasta el ocaso exactamente en doce horas. De hecho, en la tradición de la liturgia de las horas, el rezo católico universal también conocido como Oficio Divino, continúa existiendo este rezo en «la sexta hora»: se rezan maitines, laudes, prima, tercia, sexta, nona, vísperas y completas.
Como coincidía con el mediodía, la sexta hora era la de máximo calor, razón por la que en países mediterráneos se debía parar la labor y hacer un descanso: por extensión, se designó «siesta» al sueño que se toma durante esa hora.
En las tres acepciones de la palabra del Diccionario de la Real Academia Española se incluye la referencia al calor o al sueño: tiempo después del mediodía en que aprieta más el calor; tiempo destinado para dormir o descansar después de la comida del mediodía; sueño que se toma después de comer, especialmente al mediodía o durante las primeras horas de la tarde.
Darse, dormirse o hacer la siesta
Según Fundéu, lo correcto en español es 'echar la siesta', y suele tener carácter reflexivo, 'echarse la siesta'. De hecho, el propio verbo lo indica en una de sus acepciones: «Junto con algunos nombres, tiene la significación de los verbos que se forman de ellos o la de otros equivalentes. Echar maldiciones, maldecir; echar suertes, sortear; echar un cigarro, fumarlo; echar un sueño, dormir; echar la siesta, sestear.» Por su parte, «hacer la siesta» es un catalanismo, muy asentado en el castellano que se habla en Cataluña, Valencia y las Islas Baleares.
De igual forma, en el español que se habla en otros rincones de Iberoamérica se dan diferentes locuciones: en Colombia se dice 'darse una siesta', en Argentina se escucha 'hacerse una siesta' y en México es habitual 'tomarse una siesta'.
En otros otros diccionarios más antiguos, por ejemplo, el Tesoro de la lengua castellana (1611) de Covarrubias, la 'siesta' es «el tiempo que transcurre entre el mediodía y las dos de la tarde». Este mismo diccionario define sestear como «reposar a la sombra en la hora de sexta, que es la del medio día».