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El retrato de la señorita Lieser (1917) por Gustav Klimt

El todopoderoso Klimt no alcanza los 50 millones estimados en la subasta de su cuadro perdido

El retrato de la señorita Lieser había despertado un gran interés en la comunidad artística y se esperaba que alcanzase un precio de entre 40 y los 50 millones de euros

Desaparecido durante más de 100 años, este cuadro se ha subastado en Viena, más concretamente en im Kinsky, una casa de subastas localizada en la capital. El valor de la pieza, según estimaciones, iba a alcanzar entre los 40 y los 50 millones de euros. Además, su localización y venta ha despertado un gran interés, a nivel nacional, y a nivel internacional. Pese a las expectativas, finalmente se ha vendido por 30 millones.

Se trata de un cuadro con el que puede haber sorpresas, siempre que han aparecido cuadros de Klimt en subastas, se han conseguido muy buenas subidas. […]Claudia Mörth-GasserJefa de departamento de Arte Moderno de la Galeria im Kinsky

Así lo había declarado ayer EFE, para añadir que el precio de la obra «está fijado moderadamente». Pese a todas las expectativas generadas, y hasta la oferta final, se estimaba que pudiese alcanzar hasta los 75 millones de euros. Además, solo existieron tres ofertas por el cuadro y el precio de salida fue de 28 millones.

Este cuadro se conoce como El retrato de la señorita Lieser. Su autor, que había recibido 10.000 coronas para hacerlo, murió a los 55 años mientras lo terminaba. Como apunta El Mundo, Klimt podría haber recibido otro pago similar a la entrega del cuadro. Actualmente, toda la suma equivaldría a 120.000 euros.

El retrato de la señorita Lieser

El retrato de la señorita Lieser por Gustav Klimt

El cuadro se trata de óleo sobre lienzo con un fondo rojo y, situada en el centro de la obra, una mujer vestida con una pieza marcada con los toques característicos de Klimt.

¿Cuál es la historia del cuadro?

Este Klimt fue encargado por una familia de empresarios judíos, los Lieser -más tarde perseguidos por los nazis durante l-. Lilly Lieser, una mecenas notoria, fue asesinada en Auschwitz mientras otros miembros de su familia pudieron escapar.

A la obra se le pierde la pista en 1925, cuando se toma una foto en blanco y negro para una exposición del autor, aunque sin llegar a saberse si finalmente fue expuesta.

Más tarde, la pintura sufrió la misma «suerte» que otras obras cuando llegaron los nazis y anexionaron Austria en 1938, en la antesala de la II Guerra Mundial. La obra fue expoliada, junto a otras, y nada se supo de ella hasta los años 60, cuando fue colocada en una mansión lejos del centro de la ciudad donde va a ser subastada.

Después de la guerra, sus hijas vuelven a Austria y reclamaron los bienes expoliados por los nazis. Sin embargo, como recoge El Mundo, el cuadro no se menciona en dicha petición.

¿Cómo se inicia la subasta?

Ernst Ploil, uno de los gerentes de im Kinsky, recibe un telefonazo de alguien que había heredado el cuadro. En esa llamada, le contó que necesitaba ayuda para subastarlo. Como indica el protocolo, la casa de subastas investigó el caso y concluyó que «no hay pruebas de si la obra fue expoliada o no entre 1938 y 1945».

«El acuerdo es que subastan juntos y distribuyen lo recaudado», sentenció Ploil, que previamente había planteado a su actual propietario dicho acuerdo. Además de gerente, es abogado y señala que hace poco, Austria puso muchas complicaciones a los herederos para recuperar el arte robado durante la ocupación.

¿Qué precio han alcanzado otros Klimt?

Entre las obras más destacadas del autor, resaltan dos por encima de todas. La primera, Dama con abanico; y la segunda, el Retrato de Adele Bloch-Bauer I. Los precios alcanzados han batido récords y han superado, incluso, a algún cuadro de Pablo Picasso.

Venido en Sotheby's en 2023, el cuadro Dama con abanico se trata del más caro en la historia de una subasta europea y alcanzó una cifra de 99,2 millones de euros. Este precio superó, con creces, a la obra El hombre que camina I, de Alberto Giacometti, vendida también en la misma casa de subastas.

Pese al alto precio pagado por el Klimt, no sobrepasa al vendido en 2006 por 135 millones de dólares, que también pertenece al autor austríaco. La obra, el Retrato de Adele Bloch-Bauer I, fue adquirida por Ronald S. Lauder, magnate de cosméticos y superó los 104'1 millones pagados por Chico con pipa, pintado por Pablo Picasso en 1905.

Ya en lo artístico, y volviendo al cuadro subastado hoy, el misterio de la modelo sigue siendo incierto. Nadie sabe quién es y el cuadro se considera un «no acabado», sin firmar.